Los duelistas de todo el país se reúnen para jugarse sus cartas más inusuales: las cartas raras. Los cazadores de cartas raras pretenden aprovechar la ocasión para hacerse con las más poderosas. Sin embargo, Seto Kaiba entra en acción dado su interés por cierta carta divina legendaria que el mismo Pegasus dejó sellada. ¡Entonces Dominó se convierte en un campo de batalla!