Mirando por el cristal transparente de la ilusión, el futuro, es bello. De un momento al otro se rompe en mil pedazos. Rasgan la piel, sangra el cuerpo, llora el alma. Despacio vamos sanando. En el corazón, cicatrices para siempre quedan. La felicidad, lo que hemos amado, momentos intensos de deseos hechos realidad, perdurarán para siempre. Son la fuerza para buscar un poco más de ilusión. Yo en mi vida, unidas por tanta voluntad, lucharemos para que podamos llegar felices al término de nuestro camino. Carmiña Nieves