Reconocer el paso del tiempo nos lleva a una etapa vital más activa, saludable y llena de experiencias. Pasan los años y, de repente, somos mayores... Pero ¿realmente sabe- mos lo que supone envejecer? ¿Cómo repercute sobre nuestro cuerpo y nuestra mente el deterioro celular? ¿Estamos preparados para todos los cambios que nos esperan? ¿Podemos retrasar el envejecimiento y mejorar nuestro día a día? Aunque todos creemos ser conscientes del paso del tiempo, no nos gusta reconocerlo. Es cierto que no amanece un buen día y, al mirarnos al es- pejo, nos descubrimos con arrugas. Es un proceso paulatino que vamos ignorando, arrinconando para más tarde, pese a que los días nos van dejando una huella tangible: la comida no sabe igual, el sexo no es lo mismo, cambia nuestro timbre de voz, vamos perdiendo visión, se nos reseca la piel, artrosis, osteoporosis, pérdidas de memoria... Reconocerlo y poner remedio nos permitirá tener una vejez más activa, más saludable, más hermosa y llena de vida. Ese es el propósito de estas páginas: tomar conciencia de que los días nos anuncian lo que vamos a ser. Atendiendo a la máxima de que los ochenta de hoy son los sesenta de ayer, Ramón Sánchez-Ocaña aborda en este libro el proceso vital que nos conduce a cumplir años con total naturalidad, sin dramatismos, sin traumas. En estas páginas, quien nos enseñó a prevenir antes que curar todo tipo de dolencias, nos brinda valiosas herramientas para ser cons- cientes de un proceso natural lleno de sabiduría. Envejecer es la única forma de vivir muchos años. Si deseamos vivir esta etapa del mejor modo posible, si no queremos perdernos el maravilloso otoño de nuestra vida... será necesario leer estas páginas.Reconocer el paso del tiempo nos lleva a una etapa vital más activa, saludable y llena de experiencias. Pasan los años y, de repente, somos mayores... Pero ¿realmente sabe- mos lo que supone envejecer? ¿Cómo repercute sobre nuestro cuerpo y nuestra mente el deterioro celular? ¿Estamos preparados para todos los cambios que nos esperan? ¿Podemos retrasar el envejecimiento y mejorar nuestro día a día? Aunque todos creemos ser conscientes del paso del tiempo, no nos gusta reconocerlo. Es cierto que no amanece un buen día y, al mirarnos al es- pejo, nos descubrimos con arrugas. Es un proceso paulatino que vamos ignorando, arrinconando para más tarde, pese a que los días nos van dejando una huella tangible: la comida no sabe igual, el sexo no es lo mismo, cambia nuestro timbre de voz, vamos perdiendo visión, se nos reseca la piel, artrosis, osteoporosis, pérdidas de memoria... Reconocerlo y poner remedio nos permitirá tener una vejez más activa, más saludable, más hermosa y llena de vida. Ese es el propósito de estas páginas: tomar conciencia de que los días nos anuncian lo que vamos a ser. Atendiendo a la máxima de que los ochenta de hoy son los sesenta de ayer, Ramón Sánchez-Ocaña aborda en este libro el proceso vital que nos conduce a cumplir años con total naturalidad, sin dramatismos, sin traumas. En estas páginas, quien nos enseñó a prevenir antes que curar todo tipo de dolencias, nos brinda valiosas herramientas para ser cons- cientes de un proceso natural lleno de sabiduría. Envejecer es la única forma de vivir muchos años. Si deseamos vivir esta etapa del mejor modo posible, si no queremos perdernos el maravilloso otoño de nuestra vida... será necesario leer estas páginas.