Catorce años después de la publicación de Infinito, la Editorial RM presenta versus, el nuevo proyecto en forma de fotolibro que David Jiménez (Sevilla, 1970) empezó a gestar en la misma época que el primero, y que ha madurado a lo largo de todos estos años. El libro está compuesto por dos volúmenes, uno blanco y uno negro, que se complementan y entrelazan con sutiles resonancias visuales que crean una unidad indivisible. El núcleo del proyecto es precisamente esa red de destellos de luz y oscuridad que trazan el dibujo de un camino que se bifurca en dos senderos paralelos. En el espacio imaginario que se abre entre ellos se revela el verdadero sentido del viaje al que el lector ha sido invitado. Aunque el libro contiene imágenes realizadas durante 20 años en 19 países diferentes, todas pertenecen a un mismo territorio a medio camino entre lo real y lo imaginario, el universo abstracto en el que habitualmente trabaja el autor. Las imágenes que contiene, de carácter deliberadamente alejado de lo narrativo, exploran los límites de la percepción visual y nos transportan a un territorio incierto donde solo contamos con nuestra intuición para orientarnos a través de sus páginas.
Catorce años después de la publicación de Infinito, la Editorial RM presenta versus, el nuevo proyecto en forma de fotolibro que David Jiménez (Sevilla, 1970) empezó a gestar en la misma época que el primero, y que ha madurado a lo largo de todos estos años. El libro está compuesto por dos volúmenes, uno blanco y uno negro, que se complementan y entrelazan con sutiles resonancias visuales que crean una unidad indivisible. El núcleo del proyecto es precisamente esa red de destellos de luz y oscuridad que trazan el dibujo de un camino que se bifurca en dos senderos paralelos. En el espacio imaginario que se abre entre ellos se revela el verdadero sentido del viaje al que el lector ha sido invitado. Aunque el libro contiene imágenes realizadas durante 20 años en 19 países diferentes, todas pertenecen a un mismo territorio a medio camino entre lo real y lo imaginario, el universo abstracto en el que habitualmente trabaja el autor. Las imágenes que contiene, de carácter deliberadamente alejado de lo narrativo, exploran los límites de la percepción visual y nos transportan a un territorio incierto donde solo contamos con nuestra intuición para orientarnos a través de sus páginas.