Bruno Forte, actual arzobispo de Chieti-Vasto, una antigua diócesis del centro-sur de Italia, es una de las personas que más ha profundizado en nuestro tiempo en la relación entre fe e historia. Es un hombre de Iglesia que todavía no ha renunciado a poner en diálogo teología y filosofía, religión y estética, pensamiento y vida, y ello porque cree en la posibilidad de hablar sobre Dios de muchos modos. Cree también que, para posibilitar tal diálogo, conviene colmar la falta de nostalgia por la ausencia de Dios típica de la modernidad. En su opinión, este es el tiempo de la caída de las ideologías y de la razón totalizadora, pero también es el tiempo del triunfo de la identidad y de los miedos frente a la utopía. En cuanto teólogo y filósofo, pero también en cuanto pastor y punto de referencia para la Iglesia y para la sociedad europeas -también en el ecumenismo y con el pensamiento laico-, Bruno Forte ha recorrido estos senderos. A ellos invita a entrar a los creyentes de hoy.