En 1942, Seweryna Szmaglewska, miembro de la resistencia polaca, fue arrestada y conducida al campo de Auschwitz-Birkenau a la edad de 22 años. Estuvo recluida hasta enero de 1945. El 18 de julio de ese mismo año concluía Una mujer en Birkenau, que se publicaría unas semanas después, convirtiéndose en el primer testimonio de un superviviente de un campo de concentración nazi.