Mitad coreano, mitad japonés, Masaji Ishikawa ha pasado toda su vida sintiéndose como un hombre sin país. Esto se profundizó cuando su familia se mudó de Japón a Corea del Norte sus trece años y, sin saberlo, se convirtió en miembro de la casta social más baja. Su padre, coreano, fue atraído al nuevo país comunista con promesas de trabajo abundante, educación para sus hijos y una situación más alta en la sociedad. Pero la realidad fue lo contrario. En estas memorias Ishikawa relata con franqueza los brutales 36 años que pasó viviendo bajo un aplastante régimen totalitario, así como su huida de Corea del Norte arriesgando su vida. Un río en la oscuridad no solo es un retrato impactante de la vida dentro del país, sino un testimonio de la dignidad y la naturaleza indomable del ser humano.