Imagina un mundo de castas en la que la casta minoritaria fuese la dominante. Esta casta controlaría la policía, la fiscalía, la justicia, la intervención, los auditores, los medios de comunicación y cualquier otro estamento relevante. Establecería un férreo control que impidiese que el resto de castas se manifestase en público, reprimiéndoles con dureza cuando infringiesen la ley del silencio e internándoles en cárceles o centros similares, después de juicios llevados a cabo por personas que jamás han leído un libro de derecho. Un lugar en el que los poderosos privan de libertad, acosan, o reprimen a quien desean, con total impunidad y con la connivencia de la justicia. La próxima vez que camines junto a un recinto militar recuerda que ese mundo se encuentra tras sus muros. Un paso al frente destapa las miserias del Ejército Español. El autor es militar en activo con participación en Afganistán y una experiencia de doce años.