“Celeste Aída, forma divina, guirnalda mística de luz y flor”, canta Radamés en su primera y célebre aria. Después de haber triunfado y obtenido el aplauso de todos los egipcios, el obstinado capitán acepta huir hacia Etiopía con Aída. ¿Pero qué tendrá de mágico y atrayente la esclava etíope? En este libro os contamos el secreto. Aída es una cocinera sublime y Radamés, más allá de ser el ardiente conquistador que todos creen, es un extraordinario gourmet. Codornices en sarcófago, Faraona agridulce, Momias de pescado, Cuscús de Amonasro, Jeroglífico de almendras. A través de las recetas de esta refinada cocinera, nos introduciremos en la trama de la ópera de Verdi y en aquel Egipto de los Faraones, cuya fascinación ha permanecido hasta nuestros días.