Cada uno de nosotros, ya sea creyente, no creyente o una persona que busca, se encuentra bajo la influencia de proyecciones inconscientes que condicionan su representación de Dios y, por consiguiente, sus convicciones personales.Este libro, al desenmascarar esta influencia, intenta remover los principales obstáculos que se levantan en el curso de una búsqueda de sentido o de una experiencia espiritual. Dudas sobre la existencia de un Dios de amor a la vista de un mundo en el que el mal hace estragos; dificultades para creernos dignos de ser amados; representaciones de un Ser lejano, imponente, exclusivamente masculino; estériles oposiciones entre ciencia y fe, psicología y teología, sexualidad y espiritualidad...Al abordar estas barreras culturales a la creencia y la espiritualidad, el hermano Emmanuel explora una nueva teología del amor, tanto humana como divina. El hermano Emmanuel ingresó en 1989 en la comunidad ecuménica de Taizé, santuario de espiritualidad cristiana que acoge cada año a decenas de miles de jóvenes adultos de todo el mundo. Tras hacerse sensible al encuentro fructuoso entre la psicología y la teología, nos confía en este libro las tomas de conciencia más esenciales y los descubrimientos interiores más estremecedores que han ido jalonando sus veinticinco años de vida monástica.
Cada uno de nosotros, ya sea creyente, no creyente o una persona que busca, se encuentra bajo la influencia de proyecciones inconscientes que condicionan su representación de Dios y, por consiguiente, sus convicciones personales.Este libro, al desenmascarar esta influencia, intenta remover los principales obstáculos que se levantan en el curso de una búsqueda de sentido o de una experiencia espiritual. Dudas sobre la existencia de un Dios de amor a la vista de un mundo en el que el mal hace estragos; dificultades para creernos dignos de ser amados; representaciones de un Ser lejano, imponente, exclusivamente masculino; estériles oposiciones entre ciencia y fe, psicología y teología, sexualidad y espiritualidad...Al abordar estas barreras culturales a la creencia y la espiritualidad, el hermano Emmanuel explora una nueva teología del amor, tanto humana como divina. El hermano Emmanuel ingresó en 1989 en la comunidad ecuménica de Taizé, santuario de espiritualidad cristiana que acoge cada año a decenas de miles de jóvenes adultos de todo el mundo. Tras hacerse sensible al encuentro fructuoso entre la psicología y la teología, nos confía en este libro las tomas de conciencia más esenciales y los descubrimientos interiores más estremecedores que han ido jalonando sus veinticinco años de vida monástica.