Este volumen incluye dos obras prácticamente desconocidas de Guillermo de Saint-Thierry, uno de los grandes teólogos y maestros espirituales del siglo XII: el Espejo de la fe y el Enigma de la fe. Nacido en la ciudad belga de Lieja, entre 1080 y 1085, este monje benedictino concibe los dos tratados como una única obra sobre la fe; una obra estructurada en dos partes, en las que se abordan fundamentalmente otras tantas dimensiones inseparables de la fe cristiana: por un lado, el acto por el que se cree (que sería el tema del Espejo de la fe) y, por otro, el contenido de la fe, que no es otro que el misterio del Dios vivo y verdadero, es decir, el misterio de la Trinidad (al que está dedicado el Enigma de la fe).