Oraciones, evocaciones, súplicas, constataciones. Poemas breves, escuetos; algunos de dos versos, no pocos de ellos de menos de media docena de palabras. Verso blanco, ausencia total de rima y de cualquier artificio formal que pudiera complacer, anestesiar, al lector. Fogonazos, momentos súbitos de iluminación; palabras, a veces, casi proferidas en medio de un suspiro; pensamientos que se le han ocurrido al poeta y que ha apuntado en su cuaderno de notas. Una brevedad que en absoluto tiene que ver con lo nómico o aforístico. Libro atravesado todo él por una serena melancolía, "Tiempo naufragado" es solo, casi nada, un recordatorio poétic y una excelente introducción a la obra de un poeta contemporáneo de primera fila.