La vida gris de Thérèse cambia por completo en el momento en que empieza su apasionada relación con Laurent, el mejor amigo de su marido, Camille. Thérèse y Laurent deciden asesinarle para amarse con libertad. Pero, a partir de ese momento, ambos viven atormentados, creen ver a Camille por todas partes, recordándoles el crimen que cometieron. La culpa, disfrazada de espectro, los perseguirá para siempre.