En esta indagación Amado del Pino ahonda -con un lenguaje que se mueve entre el rigor del ensayo y el desenfado de la crónica- en dos universos esenciales para Virgilio Piñera. Está aquí el compromiso del autor de Aire frío con el resultado escénico de sus textos; se aprecia además la sabiduría teatral de Piñera que transmite a algunos de sus cuentos y poemas. Del Pino se centra también en la poco estudiada pasión de Piñera por la espiritualidad popular; las creencias, costumbres, el consumo de cultura (de la décima cantada al cine de barrio), la riqueza de la voz y el gesto del cubano de a pie. Aunque se aborda casi toda la producción dramática piñeriana, el análisis más detallado se consagra a las obras menos conocidas o tardíamente publicadas, escritas buena parte de ellas en los años de exclusión y silencio que no lograron doblegar la tenacidad creadora de uno de los escritores esenciales del siglo XX cubano. El libro que el lector tiene ahora entre sus manos es una sustancial aproximación a la teatralidad y las raíces populares en la obra de Virgilio Piñera. A cien años del nacimiento de uno de los escritores más importantes de Cuba y de Latinoamérica, este libro enfoca, revela, una zona importante y aún desconocida de una obra importante y todavía bastante desconocida. [
] Alguien ha dicho que a Del Pino le obsesionan las frases populares y la psicología del hombre común. No sé si sea cierto. Hablar de obsesión quizá signifique hablar de una inquietud, de la exploración de algo que parece ajeno. Instalado en esa poesía de la crudeza, donde de lo ridículo a lo sublime no hay más que un paso, Amado del Pino se encuentra en su lugar adecuado para percibir ese lado cultura popular (¿por oposición a Alta Cultura?) en la obra de un hombre para quien estas categorías parecían carecer de sentido. Amado del Pino (Tamarindo, Cuba, 1960). Graduado de Teatrología y Dramaturgia del Instituto Superior de Arte en 1982. Ha escrito, estrenado y publicado las obras Tren hacia la dicha, El zapato sucio (Premio de Dramaturgia Virgilio Piñera 2002 y Premio de la Crítica Literaria 2003), Penumbra en el noveno cuarto (Premio de Teatro José Antonio Ramos de la UNEAC 2003), Sueños del mago (ensayo, Premio de Teatrología Rine Leal 2003), entre otras. Ha incursionado también en la escritura de guiones para el cine y la televisión. Sus textos forman parte de antologías en Cuba, Argentina, México, Brasil, Puerto Rico, República Dominicana, y han sido traducidos al griego, al italiano y al portugués. Ha impartido talleres y conferencias en universidades de América Latina y España y ha sido jurado de los más importantes concursos de dramaturgia de Iberoamérica. En 2008 obtuvo el Premio Internacional de Periodismo Miguel Hernández y ese mismo año, el Carlos Arniches de Teatro (ambos en España), por su obra Cuatro menos. Su texto Reino dividido se estrenó en La Habana en 2010 y realizó una gira por varias ciudades españolas. En 2012 Penumbra en el noveno cuarto fue llevada al cine con éxito de crítica y público.