En 1581, la Corona de España se propone uno de los proyectos defensivos más ambiciosos de su tiempo: la fortificación del estrecho de Magallanes. Para ello, Felipe II ordenó la preparación, en los puertos de Sevilla y Cádiz, de una flota de 23 naves y casi 2.000 personas a cargo del general Diego Flores de Valdés. La "Sumaria relación" es la memoria redactada por el gobernador del estrecho de Magallanes, Pedro Sarmiento de Gamboa, sobre esta infeliz expedición.