Nuestro protagonista llega al colegio con una sombra extraña, que lleva sombrero de copa, bastón y uñas demasiado largas. Una sombra muy traviesa que ha conseguido que lo castigue el profesor de gimnasia. ¿Cómo han podido cambiarle la sombra? Claro, es que pasó por encima de una tumba en el cementerio. Así empieza esta truculenta historia.