Si tanto la psiquiatría como la jurisprudencia se ocuparon desde comienzos del siglo XIX de la co-nexión entre el crimen y la locura, la aparición del psicoanálisis operó como un revulsivo en el ámbito de aquellas disciplinas. El presente ensayo explora los avatares de la relación entre el discurso psicoanalítico y el discurso jurídico partiendo del hecho de que uno y otro se ocupan del mismo sujeto. Sin embargo, aunque se trata del mismo sujeto, no se puede ignorar que existe una diferencia sustancial: mientras que para el derecho el inconsciente no existe al tiempo de juzgar un acto, el psicoanálisis no concibe al sujeto sino como sujeto del inconsciente, con las consiguientes diferencias en cuanto al criterio de responsabilidad que puede atribuirse en cada circunstancia a los protagonistas.