Sus múltiples formas, la amplia gama de colores, los aromas y sabores más diversos, el aura de misterio que rodea al mundo de los hongos, han ejercido desde siempre una mágica fascinación en casi todos los pueblos y culturas del mundo. La recolección de setas para su degustación (y en menor medida para su estudio), es una actividad en alza que, potenciada por un intenso boom mediático, anima a salir al monte a un número cada vez más amplio de seteros principiantes que no siempre encuentran instrumentos adecuados para una identificación clara de las especies y, sobre todo, para una distinción entre setas comestibles y tóxicas que reúna suficientes garantías de seguridad. Al mismo tiempo, tampoco son demasiados los trabajos que consiguen reunir un amplio catálogo de setas y un buen manual culinario que ofrezca ideas sencillas y prácticas para sacarle a estos manjares exquisitos, más adecuados para la degustación que para la saciedad, todo el partido posible desde una óptica gastronómica contemporánea. Este libro pretende llenar esos vacíos. No es un libro donde las setas que necesitan identificar los micólogos principiantes se confundan con otras que no son de su interés. El lector hallará en estas páginas un catálogo claro, con descripciones sencillas y abundantes imágenes, de las especies más comunes, ordenadas según un criterio de calidad, y sólo las comestibles y tóxicas. Junto a ellas encontrará un conjunto de informaciones prácticas sobre su recolección y sostenibilidad, las mejores técnicas para conservarlas y una amplia colección con 120 recetas en las que se combinan, siempre desde la facilidad y la sencillez, los platos más conocidos de la cocina tradicional con interesantes y novedosas propuestas de la más moderna cocina creativa.