Voltaire, el filósofo e intelectual esencial del siglo de las luces, al enterarse de que otra vez está por ser detenido, se refugia en el castillo de la marquesa Émilie du Châtelet, matemática, física, traductora de Newton y una de las mujeres más brillantes de la época. Juntos, y rodeados de una biblioteca de más de veintiún mil volúmenes, pueden gozar de su pasión y del mutuo estímulo intelectual en soledad. Pese al amor intermitente que se profesaron, Émilie, siempre seductora, se labró una reputación marcada por otros afectos frecuentes y su adicción al juego, mientras que Voltaire, siempre encantador, se enamoró de su sobrina, madame Denis, aunque nunca dejó a la marquesa. Nancy Mitford narra sus agitadas vidas y disecciona con sutileza una aventura erótica entre dos inteligencias admirables, a la vez que esboza el retrato de una aristocracia escandalizada por el pensamiento libre: un cuadro fascinante de un siglo, «el de las pelucas», en el que, según Mauriac, el hombre se ha disfrazado menos.
El filósofo ignorante, escrito por Voltaire en 1766, está compuesto de apuntes breves, a veces perentorios e irónicos, a menudo sarcásticos, en los que pasa revista a las principales preguntas que la humanidad se ha formulado sobre los grandes problemas, como la libertad, la verdad, la felicidad o la existencia de Dios, y las diversas respuestas que los filósofos les han dado a lo largo de la historia.
Los detectives del callejón Voltaire deben resolver un nuevo caso y el principal sospechoso es...¡uno de ellos!. La baronesa Durocq ha sido hallada muerta en un viejo baúl y en el escenario del delito estaba Víctor. En realidad, el respetable cartero fue, muchoas años antes, un famoso ladrón en todo París. ¡Annette y Fabrice son los únicos que lo pueden sacar de apuros!
Voltaire kaleko ikertzaileek hilketa kasu bat argitu behar dute eta lehen susmagarria...euren arteko bat da! Durocq baronesa hilik aurkitu dute kutxa zahar batean, eta Victor delituaren lekuan zegoen. Egia esan postari errespetagarria Paris osoan ezagutzen zuten lapur ospetxua izan zen, aspaldi.
Las máximas y aforismos de Voltaire que el lector tiene en sus manos son una selección inédita de la extensa correspondencia que el filósofo francés mantuvo a lo largo de su vida con sus coetáneos. Muchas de las inquietudes de este pensador agudo, sagaz, ocurrente, irónico, pícaro e inconformista se manifiestan en estos pequeños fragmentos: su lucha por la tolerancia y la libertad, el rechazo a todo dogma, forma de hipocresía y manifestación del fanatismo, la crítica a la sociedad, el anuncio de una próxima revolución en Francia, el correcto uso lenguaje, y la reivindicación del sentimiento humano frente a la razón, entre otras. En 1764 él mismo, veinticinco años antes de la Revolución Francesa, anticipó: ?Todo cuanto veo arroja las simientes de una revolución, que sucederá irremediablemente?. Voltaire nunca fue un filósofo convencional ?tampoco quiso nunca serlo?, pues no desarrolló un pensamiento sistemático y tuvo una vida agitada en exceso. Tanto su presencia en los salones parisinos y en la corte de Versalles como su influencia en la política europea ?entre Postdam y París andaba el juego- nos deja el rastro de un filósofo que no sólo era contemplador desinteresado de la Verdad, sino un influyente activista político capaz de intervenir decisivamente, con su letra y su persona, en el curso de la historia de aquel siglo denominado ?luminoso?. De carácter vivo, alegre y abierto, no pudo eludir el compromiso social e intelectual con su época, y, como buen ilustrado y filósofo, amó, por encima de todo, el conocimiento. Para él, epicúreo convencido desde joven, no tenía sentido la vida sino como vida feliz, de ahí que la bonheur (felicidad) constituyese la piedra angular de su filosofía moral, una filosofía esencialmente hedonista y pragmática, como quizás lo fue todo aquello que Voltaire pensó, dijo e hizo. El último verso del poema Mondain (1736) reza así: ?El paraíso terrenal está donde estoy?.
Más que la narración imparcial y realista del reinado de Luis XIV, Voltaire escribió un elogio entusiasta de la época en que domina la figura del Rey Sol y la constelación extraordinaria de ministros distinguidos, generales afortunados y literatos de excepción que se agrupó en torno de él. He aquí uno de los periodos más brillantes de la historia política y militar de Francia.
Annettek eta Fabok buruhausgarri handi bat daukate argitzeko: arazoa XIX. mendeko nobleziako dama paristar baten eguneroko misteriotsua agertzean hasiko da. Haren jabea zen antikuarioa hil egin dute eta, egunerokoan idatzirik, hiltzailea nor den erakusten duten arrastoak sakabanaturik daude. Baina zer zerikusi dute duela mende bat baino gehiago bizi izandako dama baten gorabeherek gaur egungo Parisen gertatutako hilketarekin?
El jove Càndid és expulsat del paradís de Thunder-ten-tronckh, allunyat de la bella Cunegunda i del seu tutor Pangloss, loptimista irreductible que li ha ensenyat que vivim al millor dels mons possibles i que tot el que succeeix és a fi de bé. Quin daltabaix. Buscant-se, retrobant-se i tornant-se a perdre per mig globus terraqüi, Càndid i els seus amics coneixen la guerra, les catàstrofes naturals, la ira de la Inquisició, el robatori, la violació, la tortura, lesclavitud, lassassinat, la malaltia, la traïció, lengany i fins i tot veuen com es marceix la bellesa. Res que no sigui normal. Al capdavall, ens recorda lescèptic Voltaire en aquesta narració filosòfica exagerada i divertidíssima, que el món és «una cosa ben forassenyada i abominable». Que no ens entabanin, per això tornem als clàssics. No serà gens estrany que molts de nosaltres acabem com els protagonistes de la més famosa de les novel·les de Voltaire: envoltats de la gent que estimem i cultivant un hort. «Càndid o loptimisme» (1759) és un dels exemples majúsculs de narració filosòfica, gènere literari sorgit durant la Il·lustració. «Tota la seva intel·ligència era una màquina de guerra», va escriure Flaubert sobre Voltaire. Aquí, la va posar en marxa per denunciar tant la intolerància religiosa com loptimisme de Leibniz. Quan es va publicar va ser tot un escàndol, i va arribar a formar part de líndex de llibres prohibits per lEsglésia catòlica. Ara és un daquells llibres als quals recorrem a la recerca duna dosi de saviesa i veritat. Més encara si es presenta en una gran traducció i il·lustrada pel fabulós Quentin Blake.
En esta obra, Voltaire da forma literaria y crítica a tres años de terribles acontecimientos históricos (el terremoto de Lisboa y la guerra de los Siete Años), cargando contra la teoría de Leibniz de que vivimos en «el mejor de los mundos posibles».Cándido es una novela de aprendizaje, y su héroe, un optimista que cree a pies juntillas que el mundo es un paraíso, a pesar de que, desde la primera línea, la realidad se encarga de negarlo. Este contexto da pie a Voltaire a atacar, con ironía y sarcasmo, la intolerancia, el fanatismo, los abusos de la colonización europea en América, los engaños y artificios sociales y las matanzas de las guerras.
Razonador y polemista infatigable, filósofo de su tiempo en tanto que furiosamente antimetafísico, historiador que escudriñó con atención la realidad de su propia época, olvidando voluntariamente las viejas historias, poeta, dramaturgo, redactor de panfletos, articulista y narrador, Voltaire nos dejó una obra inmensa que es a la vez el más fiel paradigma de su siglo, el siglo de la razón y de las luces. En los cuentos, con una escritura que depende de «lo que se quería demostrar» sin someterse a ninguna otra regla, la originalidad del pensador se une felizmente al encanto e ironía del relato.
Dios, el fanatismo, las supersticiones, la condición femenina, el amor, la moral? Muchos de los debates que nos interesan en este primer tercio del siglo xxi estaban ya presentes en los espíritus ilustrados del siglo xviii. Qué mejor acompañante que Voltaire para recorrer el pensamiento de toda una época: poeta, dramaturgo, filósofo y escritor, talentoso y extravagante, Voltaire fue el enfant terrible de un siglo efervescente en el que triunfaban la razón y el debate de ideas. Para narrar esta vida de acción y pensamiento, Louis Bériot recrea una serie de encuentros entre Voltaire y sus coetáneos más ilustres: debate sobre teología con Newton, pone de los nervios a Montesquieu a propósito de El espíritu de las leyes, discute acaloradamente con Rousseau acerca del progreso, charla con madame de Pompadour sobre la idea de la felicidad, filosofa con Diderot alrededor de la muerte, vive una hermosa historia de amor con la extraordinaria Émilie du Châtelet... Un café con Voltaire es un original retrato en movimiento del filósofo más carismático de su tiempo hecho de ficción y realidad, ideas y actos, filosofía y literatura. Una lectura deliciosa que atrapará al lector desde la primera página.
40 grandes ideas que han cambiado el mundo. Este libro condensa los argumentos clave contra la intolerancia que Voltaire elaboró en su Tratado sobre la tolerancia con motivo del caso Calas. Las razones y conclusiones de Voltaire eran tan válidas entonces como lo son hoy, y la pertinencia de este texto resulta inquietante. A lo largo de la historia, algunos libros han cambiado el mundo. Han transformado la manera en que nos vemos a nosotros mismos y a los demás. Han inspirado el debate, la discordia, la guerra y la revolución. Han iluminado, indignado, provocado y consolado. Han enriquecido vidas, y también las han destruido. Taurus publica las obras de los grandes pensadores, pioneros, radicales y visionarios cuyas ideas sacudieron la civilización y nos impulsaron a ser quienes somos. La crítica ha dicho sobre la colección «Great Ideas»:«Taurus propone un doble envite con este lanzamiento. Por un lado aumenta su compromiso con el ensayo; por otro, recupera el gusto por la estética. A los volúmenes se les ha proporcionado una portada delicada y cuidada (copian el original británico) que invita a la lectura.»La Razón
Aunque Voltaire empezó a escribir cuentos en su etapa de «cortesano», cuando, como gentilhombre de la cámara del rey, debía proveer al entretenimiento de la corte, en estos textos ya estarán presentes los propósitos de toda su escritura: divulgar las nuevas ideas, combatir la ineptitud y la mentira religiosas, luchar por la tolerancia, y todo ello envuelto en ficciones narrativas que pueden llevar al lector tanto a los espacios interplanetarios como a Oriente, con las aventuras amorosas de sus princesas y huríes. Sus Novelas y cuentos son un arma más de la «máquina de guerra» que, según Flaubert, era todo lo que salió de la pluma de Voltaire. Todas sus preocupaciones, todas sus «lecciones» de filosofía de la vida, están en estos cuentos: desde su apoyo a los avances científicos de la época hasta su lucha, casi obsesiva, contra la superstición y el fanatismo religioso. Todos sus protagonistas, desde Cándido hasta el Ingenuo, después de verse arrastrados por una riada de acontecimientos aparentemente caóticos y faltos de sentido, una vez hecha por el escritor la sátira del desorden del mundo, terminan triunfando porque aplican la filosofía de la experiencia. Nunca como en estas ficciones, que reúnen la originalidad del pensador y la sátira del crítico, su espíritu y su pluma fueron tan libres.