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Resultados de la búsqueda para: Pablo de Tarso
Pedro, Pablo y María de Magdala son actores clave en los inicios de la institución histórica, social, política y, por supuesto, religiosa más longeva de la civilización occidental, la Iglesia cristiana. Pero estos tres personajes no son sólo importantes desde el punto de vista histórico, que Bart Ehrman analiza aquí desde los textos del Nuevo Testamento y desde fuentes extrabíblicas, sino que, además, resultan increíblemente fascinantes como protagonistas de leyendas y mitos, ya sea san Pedro resucitando un aranque ahumado, san Pablo bautizando a un león parlante o María Magdalena en sus diversas facetas de prostituta, esposa de Jesús o misionera en Francia. Para el doctor Ehrman estas historias son también importantes porque «expresan las creencias, preocupaciones, valores y prioridades de los cristianos», nos ayudan a comprender los orígenes del cristianismo y a repensar críticamente algunos aspectos de su doctrina. John Shelby Spong ha dicho de este libro que «es fascinante para las mentes abiertas que buscan la verdad en antiguas fórmulas religiosas, pero demoledor para aquellos que creen que están en posesión de la verdad infalible».
Pablo de Tarso fue un hombre providencial para el cristianismo y la Iglesia naciente, un hombre poseído por un espíritu emprendedor único, con unas dotes y una cultura excepcionales; buen conocedor del judaísmo, estaba preparado para ser el apóstol de los gentiles en el cristianismo. Sin pretender elaborar una biografía exhaustiva, una biografía de escuela, Antonio Marcos destaca en las páginas de este libro-semblanza los principales acontecimientos de la vida de san Pablo, ofreciendo su propia visión del santo sin temor a acercarse a lo especulativo y subjetivo, pero siempre bajo la luz del Evangelio.
Perseguidor de cristianos cautivado más tarde por el Resucitado, evangelizador infatigable, autor de cartas hermosas y difíciles, el «apóstol de los paganos» es menos conocido como maestro espiritual. Sin embargo, muchos pasajes de las cartas de san Pablo, hombre fronterizo entre la cultura judía y la griega, sirven de apoyo incomparable a la oración. Hay muchos puntos en común entre su mundo y el nuestro: el Imperio Romano es uno de los primeros esbozos de mundialización. A partir de textos escogidos de sus cartas auténticas, las meditaciones que componen este libro nos ayudan a entrar en el pensamiento paulino y alimentan profundamente la vida espiritual del hombre de hoy. Michel Quesnel, sacerdote, ha enseñado exégesis bíblica en el Instituto católico de París y actualmente es rector de la universidad católica de Lyon. Gran especialista de san Pablo, combina perfectamente su altura intelectual con la capacidad de escribir para un público amplio.
Un personaje que ocupa un lugar privilegiado en la historia occidental. Sin él, la que llamamos civilización cristiana habría tomado rumbos diferentes.
El apasionado Pablo de Tarso se entregó desde joven a buscar fieramente la verdad. Estaba seguro de que la había encontrado en la Ley que Moisés dejó para su pueblo, Israel, que la defendió a capa y espada.Supo que se equivocaba el día en que una luz deslumbradora se le apareció de improviso y lo tiró del caballo cuando se dirigía a Damasco. Llevaba en el bolsillo una autorización para perseguir a los partidarios de Jesús y cabalgaba confiado y orgulloso.Ese hecho cambió su vida. Ya no pudo ignorar su destino: transmitir la nueva verdad que se le había mostrado de manera insólita e inesperada, tirando por tierra su orgullo y su seguridad. Desde aquel momento dedicó su ida por completo a fundar nuevas comuniodades de cristianos y nuevas iglesias y le dio forma al legado que había dejado Jesús de Nazaret para que lo entendieran tanto griegos como romanos. De Tarso a Jerusalén, de Antioquía a Atenas y Corinto, de Roma a la lejana Hispania.Una entrega humana de tal alcance sólo se explica si brota de una pasión. EL propio Pablo resumió la clave de su descubrimiento vital: "Mi vida no es mía. Hay otro que vive en mí". Pablo nos habla de la mística, que explica la extraordinaria biografía de este judío nacido en Tarso, una ciudad del sur de la actual Tur
El apasionado Pablo de Tarso se entregó desde joven a buscar fieramente la verdad. Estaba tan seguro de que la había encontrado en la Ley que Moisés dejó para su pueblo, Israel, que la defendió con valentía.Supo que se equivocaba el día en que una luz deslumbradora se le apareció de improviso y lo tiró del caballo cuando se dirigía a Damasco. Llevaba en el bolsillo una autorización para perseguir a los partidarios de Jesús y cabalgaba confiado y orgulloso.Ese hecho cambió su vida. Ya no pudo ignorar su destino: transmitir la nueva verdad que se le había mostrado de manera insólita e inesperada, tirando por tierra su orgullo y su seguridad. Desde aquel momento su integridad le llevó a dedicar su vida por completo a la fundación de nuevas comunidades de cristianos y nuevas iglesias, y le dio forma al legado que había dejado Jesús de Nazaret para que lo entendieran tanto griegos como romanos. De Tarso a Jerusalén, de Antioquía a Atenas y Corinto, de Roma a la lejana Hispania.Una humanidad de tal alcance solo se explica si brota de una pasión.
Una recreación de la vida afanosa y conflictiva de Pablo de Tarso, un hombre que ha sido decisivo en nuestra cultura. Griego y judío, enemigo de Jesucristo primero y su seguidor más fanático después, es una de las más inquietantes e influyentes personalidades en la historia del mundo occidental. En esta biografía apócrifa del apóstol número trece, ven la luz datos y detalles que hasta ahora se ha procurado mantener ocultos.
No está todo dicho sobre Pablo de Tarso a pesar de que desde san Agustín, y principalmente desde Martín Lutero y la Reforma, se hayan escrito centenares de libros sobre él. Ni siquiera queda claro, como se afirma con rotundidad, que Pablo fuera el «segundo fundador del cristianismo» ni tampoco un fariseo estricto como él mismo sostiene en apariencia. Desde 1970 ha surgido una potente y nueva corriente de interpretación de la teología de Pablo, a cuyo frente están sobre todo teólogos evangélicos independientes e historiadores judíos del pensamiento israelita, que pone en cuestión opiniones aparentemente asentadas durante siglos: ¿Puede sostenerse hoy que todo o parte de Pablo ha sido malentendido durante más de quince siglos? ¿Fue el pensamiento de Pablo exclusivamente judío a pesar del entorno de su nacimiento y formación escolar en un mundo griego? ¿Abandonó Pablo la ley judía? O bien ¿se comportó siempre, incluso externamente, como un judío practicante? ¿Es posible defender que paganos y judíos se salvan no por creer en Jesucristo, sino por imitar sus actos de fidelidad? ¿Rompía la posible divinización de Jesús por parte de Pablo el monoteísmo estricto de Israel?
Año 64 d.C. Roma arde en llamas. Cuando Nerón acusa a los cristianos del incendio y se desatan las persecuciones, Marco Julio Severo, prefecto de vigiles - el cuerpo de policía y bomberos de la ciudad- escribe a Pablo de Tarso, con quien había hecho amistad años antes, informándole de la situación. Éste se apresura a regresar a Roma, en donde es capturado.Con el deseo de alejarse de las tensiones en el seno de su matrimonio con Livia y el pretexto de preparar un informe sobre el reo, Julio se sumerge de lleno -a través de los escritos de su amigo el evangelista Lucas y de las cartas del propio Pablo- en la vida del apóstol, sus años como perseguidor de los seguidores de Jesús, su conversión camino de Damasco y, a partir de ahí, sus continuos viajes para expandir la doctrina de Cristo entre judíos y gentiles, con todos los problemas que ello le acarrea y que le conducirán irremediablemente a la muerte.Con amenidad y rigor histórico, esta novela hace asequible y atractiva la figura del "segundo fundador del cristianismo", el personaje más polémico y documentado del Nuevo Testamento, crecreado con viveza en estas apasionantes páginas