Este volumen abarca un período importante de cinco años en la vida de Nietzsche. Después de la elaboración y nacimiento de la tragedia, el autor comienza a sentir el peso de la filología como profesión e inicia el proceso de emancipación de la metafísica y la búsqueda de la "libertad de pensamiento", apartándose definitivamente de Schopenhauser y Wagner.
«Este escrito, de poco más de ciento cincuenta páginas, de tono alegre y fatal, como un demonio que ríe (?), es un libro absolutamente excepcional ; no hay nada más sustancioso, más independiente, más demoledor, más malvado. Si alguien quiere formarse brevemente una idea de cómo, antes de mí, todo se hallaba cabeza abajo, empiece por este escrito. Lo que en el título se denomina ?ídolo? es sencillamente lo que hasta ahora fue llamado verdad.El ocaso de los ídolos, dicho claramente : la vieja verdad se acerca a su final.» Así escribió Nietzsche sobre este libro en Ecce Homo. Furiosamente denostado o alabado, y casi siempre mal interpretado, el autor de El ocaso de los ídolos lanza al lector la terrible sospecha de que quizá detrás de toda acción humana, incluidas las moralmente más encomiables, se oculta el resentimiento de los débiles contra los más dotados para la existencia.
El autor, Agustín Izquierdo, doctor en filosofía, nos hace un análisis de la trayectoria en las teorías de Nietzche. La obra trata el abandono de los prejuicios y creencias en la filosofía y la religión hasta el descubrimiento de una forma nueva e insólita de vida en el universo.
En la primera parte de este tomo se incluyen los fragmentos póstumos que Nietzsche redactó entre el otoño de 1885 y el otoño de 1887. Este período de la vida de Nietzsche está caracterizado por tres tareas que mantienen una íntima conexión pero claramente diferenciadas. En primer lugar, por el intento de recuperar y reeditar de manera unitaria las obras anteriores a Así habló Zaratustra. Esto le llevará a un largo y agotador conflicto con su editor. En segundo lugar, por la creación de dos obras nuevas: Más allá del bien y del mal, y Genealogía de la Moral, que mantienen entre sí una clara relación. En tercer lugar, por el comienzo del desarrollo del proyecto de una gran obra que debía reunir de manera orgánica su pensamiento filosófico. Como es sabido, Nietzsche nunca llegó a realizar este proyecto. Estos fragmentos fueron recuperados y ordenados por su hermana Elizaberth Förster-Nietzsche. En la parte final de esta obra, se incluyen los fragmentos correspondientes al periodo comprendido entre el otoño de 1887 y los comienzos de enero de 1889. estos fragmentos se encuentran recogidos en 15 cuadernos numerados del 11 al 25. Se han conservado escrupulosamente la puntuación que utiliza Nietzsche y la disposición de los textos. Se conservan los dos puntos, guiones largos, signos de interrogación y admiración, etc., tal y como aparecen en los originales, lo que en ocasiones puede resultar molesto al lector. Por último, destacar que se trata de una edición realizada bajo los auspicios de la Sociedad Española de Estudios sobre Nietzsche (SEDEN).
Descorrer el telón de la primera gran obra de Nietzsche, El nacimiento de la tragedia, nos conduce a un escenario muy reconocible, hoy quizá demasiado próximo para ser entendido correctamente. Lo que empezó en su día como provocación de un filólogo funámbulo haciendo equilibrios entre ciencia y arte en la cuerda floja del malestar de la cultura de la era moderna conforma hoy ya el suelo tembloroso de nuestra sensibilidad contemporánea. Por un lado, desde ahí se comprenden las rebeliones contraculturales, la desmitificación del principio de realidad burgués, la rebelión dionisiaca de la vida... Pero el viaje retrospectivo de Nietzsche al paisaje juvenil de la obra, en tanto centro neurálgico de su época, también implica acceder de algún modo a un observatorio médico en el que la cultura burguesa asiste inerme y autocomplaciente al proceso suicida de la estetización de la política. Sea como fuere, la batalla más importante que se libra en el libro no es la del bárbaro Dioniso contra el prudente racionalista Sócrates a fin de cuentas, Nietzsche escribe desde la conciencia de un desenfreno socrático tan desmesurado como el dionisiaco, sino la del Apolo mediador cultural un Apolo, eso sí, que venda la herida primigenia de Dioniso- contra ese Dioniso desenfrenado que es Thanatos, ese voraz agujero negro que se aprovecha del agotamiento de nuestra realidad disciplinada.
Antología de la edición integral y crítica de los Fragmentos Póstumos de Nietzsche, cuya edición completa consta de cuatro grandes volúmenes, publicada por Tecnos entre 2006 y 2009. Esta recopilación contiene una selección de los fragmentos más representativos redactados entre 1869 y 1889 e incluye reflexiones originales, esbozos preparatorios o borradores para sus obras proyectadas, así como comentarios, críticas y extractos que Nietzsche realiza al hilo de sus lecturas. Es, por tanto, un material no sólo ilustrativo, sino también polémico a juzgar por las muchas discusiones que ha originado entre partidarios y defensores. El material se publica organizado según el recorrido cronológico de su génesis, siguiendo el texto establecido por la edición de G. Colli y M. Montinari. No obstante, la edición castellana que le sirve de base se ha realizado con criterios propios de actualización y adaptación al público hispano-parlante. La traducción ha sido llevada a cabo por profesores universitarios especialistas en la obra de Nietzsche.
Se recogen en este volumen tercero los fragmentos póstumos de uno de los períodos de mayor intensidad creativa de Nietzsche, el de la elaboración de los cuatro libros de que consta su Así habló Zaratustra. Junto a notas de lecturas hechas para documentar y apoyar la trama poética de sus cantos, en buena parte se trata de escritos «secretos», «esotéricos», muchos de los cuales no fueron luego utilizados en la redacción final de la obra mayor de Nietzsche. Zaratustra es, sin duda, su libro más oscuro, el que por muchas razones debería leerse el último. Por ello, a su mejor comprensión ayudará sobremanera la lectura simultánea de los fragmentos aquí reunidos, pues contienen el trabajo de gestación de sus enigmáticas imágenes, metáforas y discursos, el lirismo de sus gesticulaciones estilísticas y las claves de sus recursos dramáticos, simbólicos y alegóricos. En el trasfondo de tal abigarramiento de medios de expresión, pueden reconocerse, no obstante, temas capitales que ocupan en este período el pensamiento de Nietzsche: la relación entre el azar y la necesidad, la crítica radical a la moral, una nueva modulación del concepto de mentira y de simulacro y, sobre todo, la nueva filosofía de Dioniso fundada en el pensamiento del eterno retorno. Así, en las huellas dejadas por la búsqueda nietzscheana de un nuevo estilo para una nueva filosofía, asistimos a la inusitada vibración de sus ideas en una escritura dotada de sorprendente poder comunicativo.
Este segundo volumen contiene los fragmentos póstumos de un período denso de acontecimientos importantes en la vida de Nietzsche: el agravamiento de su enfermedad, el abandono de la Universidad, la ruptura con Wagner, el inicio de su vida errante, el idilio con Lou Salomé, etc. Años tempestuosos pero de intensa actividad creadora, en los que compone y publica las tres obras que cubren su etapa " ilustrada " : Humano, demasiado humano, Aurora y La gaya ciencia. En los fragmentos aquí recogidos es posible captar porqué Humano, demasiado humano es, en frase del propio Nietzsche, " el monumento de una crisis " , es decir, la expresión del distanciamiento sin retorno de sus ideas romántico-wagnerianas y schopenhauerianas de juventud. Y cómo Aurora, en cambio, respira ya la atmósfera de la curación, cuando Nietzsche encuentra su nueva meta en el ejercicio genealógico del conocimiento. La gaya ciencia, por su parte, es, en este recorrido, a la vez la conclusión de un proceso de maduración intelectual y la pausa gozosa que precede al " Incipit tragoedia " que representa Zaratustra. Los fragmentos que preparan su elaboración dan testimonio de la conexión que Nietzsche quiere establecer entre saber y alegría, frente al pathos represivo y fúnebre de la filosofía clásica. Ello alumbra nuevos enfoques en temas como el del origen y naturaleza del conocimiento, el lenguaje y la sociedad, la relación de la conciencia con el cuerpo, la crítica a la moral y al cristianismo, la muerte de Dios, el amor fati o los primeros esbozos de la intuición del eterno retorno. Abundan las composiciones poéticas, las metáforas y el arabesco imaginativo incrustados en el discurso racional, en la forma inimitable, característica e irrepetible del estilo de Nietzsche.
Los años de 1880 a 1884 ocupan un lugar crucial en la trayectoria vital e intelectual de Friedrich Nietzsche. En este período empezó su vida de «filósofo errante» y alcanzó su plena madurez filosófica, estableciendo las bases del proyecto filosófico que se dedicaría a desarrollar hasta sus últimos días. Son los atribulados años de la concepción y composición de Aurora, La gaya ciencia y Así habló Zaratustra. En ellos aparecen ya los temas fundamentales de su pensamiento: la crítica a la moral y al cristianismo (en sus propias palabras, la más radical llevada a cabo nunca), la rehabilitación de la apariencia (en contra de toda la tradición filosófica), la transvaloración de todos los valores, el superhombre, la voluntad de poder y el eterno retorno. Estas cartas enviadas a sus amigos y familiares desvelan la dimensión más vital del pensamiento de Nietzsche. En ellas se descubre hasta qué punto sus reflexiones filosóficas arrancaban de hondas experiencias y motivaciones personales. Pues esta época contiene también muchas vicisitudes que marcaron su vida, como la situación de soledad e incomprensión, los conflictos familiares y su relación con Lou von Salomé y Paul Rée. Precisamente de la experiencia traumática que supuso la ruptura de esta profunda amistad y de la enorme tarea de «trasformar el fango en oro», nacerá el Zaratustra.
La enorme influencia que Friedrich Nietzsche ejerce en el pensamiento contemporáneo -debida tanto a su enfoque crítico-radical de los temas que aborda como a la originalidad con que los desarrolla- ha podido ocultar en ocasiones una dimensión especialmente perseguida por el pensador: la estrictamente literaria. Es en su poesía donde esta tensión de y por la palabra se manifiesta con todo su vigor. Con la precisión propia del filólogo que fuera y la imaginación del artífice de ideas, Nietzsche alterna en sus poemas ironía, pasión, profundidad crítica, sobriedad y desmesura. Pensamiento, palabra y estilo se revelan, así, indispensables en su poesía; poesía que constituye, en buena medida, reflejo de un itinerario vital y síntesis versificada de sus ideas. Por lo demás, la presente edición bilingüe, hecha a partir de la edición de referencia de G. Colli y M. Montinari, reúne y ordena todas las poesías conocidas hasta la fecha que Nietzsche escribió a lo largo de su vida intelectual, de 1869 a 1888. Gracias a ello se da a conocer pro primera vez en castellano el material completo para valorar al Nietzsche poeta.
" Así habló Zaratustra " , el libro más célebre y controvertido de toda la obra de Friedrich Nietzsche, se sirve de la figura semilegendaria del filósofo persa del siglo VI a.C. para desarrollar, mediante una trama de elementos narrativos, conceptuales y líricos, los cuatro grandes temas que integran su legado: el superhombre, la muerte de Dios, la voluntad de poder y el eterno retorno de lo idéntico.