Resultados de la búsqueda para: Miguel de Cervantes Saavedra





DON QUIJOTE DE LA MANCHA . SELECCIÓN (DE CERVANTES SAAVEDRA, MIGUEL)
Cervantes escribió un libro divertido, rebosante de comicidad y humor, con el ideal clásico de deleitar aprovechado. Por eso quiso crear una obra para todos los lectores, según las capacidades de cada cual. Su ambición de totalidad abarca desde el lector más inocente hasta el más profundo, de modo que parece incluido todo cuando preocupa al ser humano. Los capítulos no seleccionados han sido resumidos, lo que hace posible conocer el contexto de la historia que se narra en el capítulo propuesto para análisis. Además, propone fragmentos de los que ofrecen mayor interés, acompañados de actividades.

EL PEQUEÑO QUIJOTE (CERVANTES SAAVEDRA, MIGUEL DE)
Próximos a celebrar el IV centenario de la publicación de la primera parte del Quijote en 1605 ofrecemos, al lector interesado, los seis primeros capítulos y parte del siete, ilustrados con hermosas estampas y letras capitulares por el pintor y grabador R

DON QUIJOTE (DAVIS, ROB / DE CERVANTES SAAVEDRA, MIGUEL)
Rob Davis se ha atrevido a trasladar la genial obra de Miguel de Cervantes, Don Quijote de la Mancha, al lenguaje de la novela gráfica. El resultado es sorprendente. Ha conseguido plasmar la complejidad de la novela sin perder el carisma y evolución de los personajes principales, además de la crudeza, ironía y comicidad contenidas en ella e incluir las historias insertadas dentro de esta magna obra. Una nueva experiencia de lectura para una obra de siempre.

ESTUCHE CERVANTES VOLS. I Y II (CERVANTES SAAVEDRA, MIGUEL DE)
En la " Eneida " (6, 268) hay una doble hipálage que Borges se encargó de celebrar: " Ibant obscuri sola sub nocte per umbram " . En cierto soneto referido a «un soldado de Urbina», en aquella zona de sombra en que don Quijote y Sancho tal vez no soñaban aún con atravesar «el fondo de algún sueño», Borges recordó la hipálage virgiliana para evocar a Cervantes en otro endecasílabo: «erraba oscuro por su dura España». Durante su vagabundeo por la dura España de finales del XVI, Cervantes conoció ventas y caminos, pícaros de toda laya y clérigos hostiles, farsantes de barbas postizas y creadores de «tramoyas, nubes, truenos y relámpagos, desafíos y batallas». Quizá también algún caballero insomne. No es improbable que de ahí surgiera la confesión de don Quijote, que es la suya: «Desde muchacho fui aficionado a la carátula, y en mi mocedad se me iban los ojos tras la farándula». Es seguro que aquel mundo contenía en germen el inagotable universo de sus novelas. Cervantes fue hijo de un cirujano, noble palabra que en aquella época era sinónimo de barbero y sacamuelas. Un cirujano también podía hacer una sangría, que desde Lope sabemos «que a veces da salud y a veces mata». Pero el hijo del barbero fue tan encantador como Merlín. Del bagaje adquirido en su trato con nobles como con arrieros, en sus lecturas de Garcilaso como de libros de caballerías, de la épica como del refrán, elaboró un lenguaje popular, tan expresivo como carismático, cifra y resumen de los diálogos de caballero y escudero.

ENTREMESES DE CERVANTES (CERVANTES SAAVEDRA MIGUEL DE)
Adaptación de cuatro Entremeses de Cervantes en los que bajo su prisma, la sociedad que le rodeó aparece desnuda ante los ojos de todos cuantos le contemplamos, ayudándonos a conocer su concepción de las cosas y de las gentes. En "El juez de los divorcios" los maridos maltratados de cuatro matrimonios aceptan la separación que sus mujeres solicitan. En "La elección de los Alcaldes de Daganzo" nos presenta a un tribunal que debe elegir al futuro alcalde del pueblo. En "La guarda cuidadosa", cierto soldado celoso vigila la casa de Cristina para que no la conquiste un Sacristán ni la visite cualquiera. Y en "El viejo celoso" la señora Ortigosa hace pasar a casa de su vecina Lorenza a su amante.