Montaigne es el hijo por excelencia del Renacimiento. Y de su padre, naturalmente, que se empeñó en que la lengua materna de su hijo fuese el latín. De ese modo, el pequeño Michel a los seis años leía las " Metamorfosis " en su lengua original, y uno después a Virgilio, cuyas " Geórgicas " admiraría hasta el final. Estudió leyes en Toulouse; fue alcalde de Burdeos como su padre; leyó el " Heptamerón " y hospedó en su casa a Enrique de Navarra; viajó por Suiza, Italia y Alemania, y dejó un " Diario de viaje " que vio la luz doscientos años después. Tuvo un amigo, Étienne de la Boétie: su amistad, como la de Niso y Euríalo, como la de Pílades y Orestes, ha pasado a ser figura y paradigma. Los " Ensayos " es una de esas obras que puede figurar sin reparo en la biblioteca esencial de la humanidad y nos reconcilia con ella. Montaigne -aquel " bordelés escéptico " , como lo llamó Carpentier- habla con la misma libertad y sensatez del conocimiento, de la razón o de la tortura, que de las dimensiones (discretas) de su pene. No mitifica nada, todo lo mira con un saludable escepticismo y cierta melancólica distancia, pues, dice él, " solo los locos están seguros y resolutos " ; un oportuno distanciamiento que le impedía caer en fáciles idolatrías. Incluso de las letras escribe: " Téngolas en gran estima, mas no las adoro " . Incluso de la razón - " cántaro de doble asa, que se puede agarrar por la derecha y por la izquierda " -, sabe añadir que " proporciona fundamento para distintas acciones " (II,12).
En 1580, Michel de Montaigne dio a la imprenta la primera edición de sus dos libros de Los ensayos. El éxito fue tan arrollador que, dos años más tarde, apareció una nueva edición, aumentada con un tercer libro y con notables adiciones y correcciones en los dos primeros. Se completaba así la redacción de uno de los libros que mayor prestigio e influencia han tenido en el pensamiento occidental. Sin embargo, el gentilhombre perigordino siguió trabajando en el texto de sus ensayos hasta su muerte, acaecida en 1592. Tres años más tarde, Marie de Gournay, «fille d?alliance» de Montaigne, presentaba una edición de Los ensayos siguiendo las instrucciones que le diera su autor, edición que durante siglos ha sido considerada canónica, hasta que Strowski preparó la suya entre 1906 y 1933. Hoy, el de Marie de Gournay es visto de nuevo, con justicia, como el texto de referencia, y sirve de base a todas las ediciones recientes fiables. Éste es también el que el lector hispano encontrará en la presente edición, enriquecida con referencias a los múltiples estadios que experimentó el texto y con un completo aparato de notas. Una edición útil al especialista y próxima al lector común.
Amb aquest Llibre tercer, Edicions Proa clou la publicació completa per primer cop en català dels Assaigs de Michel de Montaigne (Perigord, 1533 - 1592), una obra que iniciava un nou gènere literari: l'assaig. Fill de l'humanisme i de l'afany cultural i artístic del Renaixement, Montaigne creia que el saber havia de permetre a l'home l'aprenentatge per viure i morir serenament. L'assagista francès escriu sobre la por, sobre els costums en el vestir, la solitud, les olors, la vanitat i l'art de conversar. Home de vasta erudició i cultura literària, Montaigne se serveix de les lectures dels clàssics per entreteixir les seves reflexions, amb un estil planer que dóna a l'obra un to de conversa.Vicent Alonso (Godella, 1948), escriptor i professor de literatura catalana contemporània a la Universitat de València, ha traduït al llarg dels darrers quinze anys els Assaigs de Montaigne, el primer volum dels quals va rebre el Premi de la Crítica Serra d'Or a la millor traducció publicada l'any 2006.
En 1580, casi diez años después de su retiro voluntario en la torre del castillo de su propiedad, Michel de Montaigne dando, quizá, por terminada su obra y temiendo, tal vez, a los peores enemigos de su salud, el aburrimiento y la ociosidad, decide abandonar temporalmente su torre y satisfacer su deseo de ver " cosas nuevas y desconocidas " con un viaje. Italia era destino común a todos los hombres civilizados de su tiempo y Montaigne parecía reunir las cualidades necesarias para ser el perfecto viajero. Si los «Ensayos» son, a su modo, una especie de veleidosa y descarnada autobiografía del autor, las memorias intelectuales o especulativas de un gentilhombre capaz de proponer, ofreciéndose él mismo como ejemplo de imperfecciones, una cierta forma de vida basada en la libertad mental, la tolerancia, el sentido común y la aceptación de la diversidad humana, en el «Diario» la materia especulativa es, primordialmente, su materia física, corporal, deleznable. Esta proliferación de datos fisiológicos, expuestos sin la menor galanura, denota que el «Diario» no fue jamás escrito con la intención de que fuera publicado.
«Els caníbals» (Assaigs, I, XXXI) és un dels textos fundacionals de la Modernitat: el primer cop que Occident, partint de la tradició grecollatina, mira els ulls de laltre sense considerar-lo ni un infrahome ni un ésser mitològic. Carregada de contradiccions, aquesta conceptualització de la diferència antropològica acabarà marcant el nostre destí com a civilització.
Nada inquieta más a los padres, ni les suscita más dudas y temores, que la eduación de sus hijos. Este ensayo de Montaigne les servirá de guía y consejo, al tiempo que confiere el suficiente aplomo para desenvolverse en tan difícil tarea. No es fácil: en ella se ha de conjugar una cierta liberalidad, la suficiente para que los hijos ganen para sí autonomía, con dosis justas de firmeza. Sin ella, los hijos se desencaminan con demasiada facilidad. Con más de la necesaria, se vuelven pusilánimes y miedosos.
Los Ensayos de Montaigne, publicados en sucesivas ediciones entre 1580 y 1588, inauguran un género de la literatura universal. Bajo ese título entonces novedoso, el autor concibe sus escritos como 'tentativas' de un pensamiento que aborda con audacia temas de diversa índole, extensión y enjundia. Inquietudes de la época, aspectos de la vida cotidiana, rasgos y anécdotas de la antigüedad, graves cuestiones filosóficas y morales se tratan sin sujeción a prejuicios ni sistemas, en un lenguaje libre que prescinde de toda retórica. Profundamente impregnados por la cultura clásica, los Ensayos parecen entablar una amena conversación, no solo con los autores antiguos y modernos que frecuentemente citan, sino sobre todo con el lector, auténtico destinatario de unas reflexiones cuyo objeto último es la condición humana en toda su complejidad y variación. Por ello dirá el autor que él mismo es la materia de su libro: así, su autorretrato sirve para revelar al ser humano, que él define como 'un objeto extraordinariamente vano, mudable y fluctuante'. Esta edición de los Ensayos, primera bilingüe en el ámbito hispánico, presenta el original francés, depurado y modernizado, frente a una traducción rigurosa y sensible a las múltiples cualidades del texto. Al final del volumen, un exhaustivo bloque de notas permite al lector desentrañar en toda su riqueza la urdimbre de esta obra excepcional.
Hay una clase de gloria que consiste en la opinión demasiado ventajosa que formamos de nuestro valer. Es una afección inmoderada, merced a la cual nos idolatramos, y que nos representa a nuestros propios ojos distintos de lo que realmente somos.
Selección con algunas de las principales tesis del autor en el ámbito de la ética y las costumbres, además del testimonio sobre sí mismo, que es lo más llamativo de los Ensayos.
Ideas que han cambiado el mundo. A lo largo de la historia, algunos libros han cambiado el mundo. Han transformado la manera en que nos vemos a nosotros mismos y a los demás. Han inspirado el debate, la discordia, la guerra y la revolución. Han iluminado, indignado, provocado y consolado. Han enriquecido vidas, y también las han destruido. Taurus publica las obras de los grandes pensadores, pioneros, radicales y visionarios cuyas ideas sacudieron la civilización y nos impulsaron a ser quienes somos. Una mirada extremadamente inteligente sobre temas como las relaciones, los olores, la moderación, los libros o el miedo: la filosofía del creador de la forma moderna del género del ensayo, y la exquisitez de su sentido del humor. Comentarios sobre la colección Great Ideas:«De veras que la edición es primorosa y pocas veces contenido y continente pueden encontrarse mejor ensamblados y unidos. ¡Qué portadas! Para enmarcar. [...] Ante las Great Ideas, solo cabe quitarse el sombrero. ¡Chapeau!»ABC «Taurus propone un doble envite con este lanzamiento. Por un lado aumenta su compromiso con el ensayo; por otro, recupera el gusto por la estética. A los volúmenes se les ha proporcionado una portada delicada y cuidada (copian el original británico) que invita a la lectura.»La Razón «Un fenómeno editorial.»The Guardian «Aparte de los contenidos, en general muy bien elegidos, son tan bonitos que si los ven seguro que cae alguno.»El País «Ideas revolucionarias, crónicas de exploraciones, pensamientos radicales... vuelven a la vida en estas cuidadísimas ediciones, muy atractivas para nuevos lectores.»Mujer Hoy «Grandes ideas bien envueltas. De Cicerón a Darwin, esta colección entra por los ojos.»Rolling Stone «Original y bella iniciativa la emprendida por Taurus con su colección Great Ideas.»Cambio 16 «Hay libros inmortales, libros únicos que contienen pensamientos y reflexiones capaces de cambiar el mundo, tesoros en miniatura reagrupados en la colección Great ideas.»Diario de León
Sólo busco en los libros el gusto que me proporcione un honrado entretenimiento; o, si estudio, sólo busco la ciencia que trate del conocimiento de mí mismo y que me instruya en un bien morir y un bien vivir.