Resultados de la búsqueda para: Mark Twain





TOM SAWYER Y HUCKLEBERRY FINN (PACK) (TWAIN, MARK)
Tom Sawyer vive con su tía en un pueblo a orillas del Misisipi. Tiene que ir a la escuela, asistir a los oficios religiosos, lavarse regularmente y llevar zapatos. Sólo que a él no le hace ninguna gracia ninguna de estas cosas. Prefiere correr libre y descalzo con su inseparable amigo Huckleberry Finn. Porque los árboles están ahí para ser trepados y para ser convertidos en barcos pirata, los compañeros son la perfecta tripulación y la vida, una aventura. Pero Tom no sospecha que su mundo se trastocará cuando conozca a Becky, la nueva vecinita.Huckleberry Finn no es feliz viviendo con la vidua Douglas, que lo acogió al final de las aventuras de Tom Sawyer. Pero va haciendo de las suyas con Tom y los colegas, hasta que aparece su padre, a quien creía desaparecido. Éste se lo lleva a vivir en una cabaña, per Huck huye y se junta con Jim, un esclavo fugitivo. Los dos vivirán, por todo el Misisipi, un puñado de aventuras.

DIARIOS DE ADÁN Y EVA (TWAIN, MARK)
Con su ingenio y encanto habituales, Mark Twain (1835-1910), uno de los más grandes escritores de nuestro tiempo, nos presenta la historia del Jardín del Edén. He aquí los divertidos y amenos diarios de Adán, el padre legendario, y Eva, la madre de la raza humana. Las relaciones entre el sexo femenino y el masculino ¿han sido siempre las mismas? Twain nos responde a esta pregunta presentándonos a nuestro padre Adán constantemente importunado por la curiosidad de su compañera hembra que, con la naturaleza inquisitiva y su practicidad y sagaz modo de ver cuanto le rodea, pone e impone nombre a todos los lugares, seres, y animales del jardín, Es Eva quien “descubre” (antes que su compañero) no sólo el fuego o el humo sino también sentimientos tan universales como el amor, el dolor, y la belleza de las cosas... También, claro está, el amor y la atracción hacia su gandul y a veces tosco compañero que no tiene otro remedio que llegar a una única y posible conclusión: “allí donde estaba ella, estaba el paraíso”. Twain nos rememora así el conmovedor y secular mito del paraíso o jardín del Edén utilizando de modo magistral el humor, el sarcasmo, la inteligencia incisiva y unos sutiles toques de patetismo para mostrarnos las ancestrales debilidades y modos de ser de la naturaleza humana.

EL HOMBRE QUE CORROMPIÓ A HADLEYBURG . Y OTROS RELATOS (TWAIN, MARK)
Samuel Taylor Clemens (Mark Twain), el más grande escritor satírico norteamericano, trabajó como impresor y piloto de barcos fluviales en el Mississippi antes de hacerse reportero. Sus primeras historias publicadas en periódicos obtuvieron un inesperado éxito. Entre 1876 y 1884 escribe sus obras más conocidas: Tom Sawyer (1881), Príncipe y mendigo (1881), Vida en el Mississippi (1883) y Huckleberry Finn (1884). Tras arruinarse, en 1890 inició una vuelta al mundo como reportero y escribió multitud de ensayos y artículos sobre aquel maratoniano periplo. El presente volumen reúne ocho de las mejores historias cortas de Mark Twain, escritas en diferentes etapas de su carrera, entre las que destacan «La famosa rana saltadora del condado de Calaveras» (1865), su primer relato, en el que un apostador empedernido adquiere una extraordinaria rana con la que reta a todos los criadores del condado; «El robo del elefante blanco» (1882), que narra las peripecias del traslado desde la India a Inglaterra de un peculiar regalo del rey de Siam a la reina Victoria, un elefante blanco sagrado; «El billete de un millón de libras» (1893), la disparatada historia de un joven americano que se encuentra en Londres sin un duro y es objeto de una apuesta entre dos excéntricos caballeros: ¿sería capaz de sobrevivir un mes con un cheque incobrable de 1.000.000 de libras?; «El hombre que corrompió a Hadleyburg» (1899), que nos cuenta cómo un pequeño pueblo que presume de virtuoso se olvida de sus valores ante la seductora oferta de un forastero llegado a la villa, y «Un relato policial con doble sentido» (1902), una parodia sherlockiana que relata una venganza que pasa de una generación a otra.

¿QUÉ ES EL HOMBRE? (TWAIN, MARK)
Los estudios para este ensayo fueron comenzados hace veinticinco o veintisiete años. Fue escrito hace siete. Lo he examinado una o dos veces por año desde entonces, encontrándolo satisfactorio. Lo he revisado de nuevo y me sigue satisfaciendo por considerar que dice la verdad.

EL CUERPO DEL DELITO . ANTOLOGÍA DE RELATOS POLICIACOS CLÁSICOS (POE, EDGAR ALLAN / HAWTHORNE, NATHANIEL / COLLINS, WILKIE / TWAIN, MARK / WILDE, OSCAR / LONDON, JACK)
El cuerpo del delito es una recopilación de trece magníficos relatos policiacos clásicos que alterna textos consagrados con otros menos conocidos, todos ellos perfectamente representativos de las variantes de la literatura policiaca, teniendo siempre presente la máxima exigencia de calidad literaria, desde sus prolegómenos y fundación a mediados del XIX hasta los años veinte del siglo pasado.

Empezando con un relato de Hawthorne que puede considerarse precursor del género, la antología sigue con un cuento poco conocido de Poe, autor que fijó los rasgos principales del relato policiaco, y luego con relatos de grandes autores que lo cultivaron de forma tangencial como Dickens, perfecto conocedor del hampa, Wilkie Collins, Jack London, Oscar Wilde y Mark Twain, todos ellos con un delicioso trasfondo humorístico. Por supuesto recoge además uno de los famosos relatos de Conan Doyle protagonizados por el inefable Sherlock Holmes, y relatos menos conocidos de la baronesa Orczy y Richard Austin Freeman, autores que se dedicaron casi en exclusiva a la literatura policiaca y que gozaron de gran popularidad en la época. Asimismo encontramos un relato del caballeroso ladrón de guante blanco Arsène Lupin, creado por el francés Maurice Leblanc y un cuento de Jacques Futrelle, protagonizado por el profesor Van Dusen, apodado La Máquina Pensante.
La recopilación se cierra con uno de los relatos de Chesterton protagonizados por el famoso Padre Brown, más partidario siempre de redimir al delincuente que de castigarlo.

GUÍA PARA VIAJEROS INOCENTES (TWAIN, MARK)
En 1867, parte del puerto de Nueva York la primera excursión turística moderna que se conoce, con destino a los escenarios clásicos del Mediterráneo. A ella se apunta el que sería luego el padre de Tom Sawyer -armado con ese humor mordaz y ese dominio del lenguaje que lo caracterizan y que lo convertirán en uno de los escritores norteamericanos más importantes de todos los tiempos-, con el compromiso de mandar crónicas del viaje al periódico que le paga el billete, el Alta California.