En 1668 la Monarquía Hispánica reconoció formalmente la independencia del reino de Portugal. Sería inocente considerar que esa fecha puso fin a los recelos a ambos lados de la frontera: al contrario, sabemos que la idea de reintegración de los antiguos vasallos estuvo muy presente en la Corte de Madrid a finales del siglo XVII y que aún coleó con la Guerra de Sucesión como telón de fondo. Este libro pretende, sin embargo, rastrear la pervivencia en la Península Ibérica de una empresa unificadora no unidireccional y que supera, por tanto, el marco de un «Portugal de los Austrias». Para ello, presenta un abordaje diferente al practicado tradicionalmente y muestra un Portugal activo y generador de modelos políticos para todo el ámbito hispano que poco tiene que ver con el rol pasivo que con frecuencia le ha sido atribuido en sus relaciones con España.
El contexto organizacional actual está experimentando una evolución continua debido a la transformación de lo que era una economía principalmente industrial en una economía mucho más basada en el conocimiento y orientada a servicios virtuales. Este cambio en el panorama económico global, los efectos de la tecnología y el cambio demográfico de la fuerza de trabajo han tenido y continuarán teniendo un profundo efecto tanto en los negocios como en la recompensa total. El contrato básico del empleado, o el «acuerdo» entre empleadores y empleados ha evolucionado a lo largo de la historia y seguirá haciéndolo en el futuro. Los cambios han ido sucediéndose a medida que cambiaban y crecían las necesidades tanto de la organización como de los propios empleados. Lo que sí ha sido una constante (y probablemente lo será) es que la organización necesita personas para alcanzar el éxito. Las organizaciones inteligentes confían y se apoyan en los profesionales de Recursos Humanos y de Recompensa Total, para encontrar consejo y orientación sobre cómo maximizar realmente el Capital Humano. Anne C. Ruddy, Presidente de WorldatWork.