Julia y sus dos amigos, Jorge y Javier, presencian un día la muerte de un hombre desconocido. Éste, antes de morir, le da a Julia un paquete y le hace prometer que lo entregará en la mansión del lago. Los chicos descubren que el misterioso paquete contiene una escultura, el famoso halcón maltés, que quedará por unos días en manos de los tres amigos y que les obligará a correr una aventura tan peligrosa como emocionante.
Una extraña herencia, una conjura internacional, un enigma por resolver: «El ojo del halcón». Viudo, sesenta y ocho años, profesor de secundaria jubilado, padre de una hija que no contesta al teléfono, lector resignado de novelas de quiosco: no parecen rasgos que concuerden con el héroe tradicional de los relatos de intriga. Pero cuando en su tediosa existencia se interpone un mensaje en clave que promete revelar misterios de siglos atrás, Santiago Beltrán comprende de súbito que para ser protagonista de una trama policíaca basta con estar dispuesto a descalzarse las pantuflas. En pocos meses, comprobará con una combinación de curiosidad, entusiasmo y pánico cómo sus problemas de tensión se entremezclan con el legado de un arqueólogo nazi y sus esfuerzos por recomponer su maltrecha familia se ven amenazados por la presencia de un antiguo dios egipcio con cabeza de halcón: Horus, cuyo ojo sagrado otorgó la victoria a los ejércitos de Alejandro, César y Napoleón. Todo para acabar reconociendo que huir en medio de la noche de hombres que no conoce y exhumar secretos de archivos que se remontan a la Segunda Guerra Mundial merece más la pena que pasar el domingo jugando al dominó. Aunque el corazón ya no esté para esos trotes.
Julia y sus amigos presencian la muerte de un hombre desconocido. Antes de exhalar su último suspiro, les suplica que entreguen un misterioso paquete en la mansión del lago. Los cuatro jóvenes descubren que contiene una valiosa escultura, el famoso Halcón Maltés, que permanecerá por unos días en sus manos y les obligará a correr una aventura tan emocionante como peligrosa.
Los años veinte y treinta, los que anteceden a la Segunda Guerra Mundial, fueron años de grandes biografías literarias, género este que llega a su madurez y se pone, como quien dice, de moda en ese momento gracias a Stefan Zweig, Lytton Strachey, Emil Ludwig, André Maurois, Essad Bey y algunos otros. En España destacan como biógrafos, sobre todo, los escritores Benjamín Jarnés y Manuel Chaves Nogales. Pero también hay entre nosotros una «pequeña joya» relativamente tardía: Recuerdos de Fernando Villalón, Poeta de Andalucía la Baja y ganadero de toros bravos. Apuntes para la historia de una familia (1940), de Manuel Halcón, obra que ha ido siendo fervorosamente leída por lectores de varias generaciones a lo largo de más de medio siglo. Los Recuerdos es la obra más significativa y madura de Manuel Halcón y una gran biografía novelesca de un singularísimo personaje, el poeta Fernando Villalón, además de un retrato de su tiempo y del campo andaluz en toda su grandeza. La presente edición, a cargo de dos competentes especialistas, Jacobo Cortines y Alberto González Troyano, incluye en un Apéndice, «El poeta en los negocios» (1951), un texto casi desconocido, y otros escritos, algunos inéditos, en los que Halcón vuelve de nuevo a la figura de Fernando Villalón. Manuel Halcón (Sevilla 1900-Madrid 1989) fue un escritor de su tiempo: el que va de la Generación del 27, de la que fue miembro activo por su participación en Mediodía, hasta llegar casi a nuestra contemporaneidad. Un escritor comprometido con la problemática de su entorno y no sólo con la de su privilegiada clase social. La confrontación entre riqueza y pobreza y el erotismo, como motor de las relaciones humanas, felices unas veces y trágicas otras, son los pilares sobre los que descansa buena parte de su narrativa. El campo, Sevilla, la Andalucía romántica, Madrid y la Costa del Sol son los escenarios escogidos para plasmar una problemática, como es la de la condición humana, que pertenece tanto a su tiempo como al nuestro, y ha de pertenecer al de los futuros lectores.
Se le llama ojo de halcón a una tecnología que se ha generalizado en los grandes torneos de tenis para dilucidar con exactitud aquello que escapa al ojo humano. Desde las alturas, el halcón es capaz de captar los pequeños detalles y percibirlos con asombrosa nitidez, mientras que a ras de suelo no posee más agudeza visual que muchos otros animales. De un modo semejante escudriña el filósofo el mundo que le rodea: no es que vea más que los demás porque sí, sino que desarrolla una especial sensibilidad para conciliar la perspectiva de lo concreto con la perspectiva de lo general. La filosofía es cambiar de plano, detectar aspectos singulares de la realidad y dotarlos de mayor significado al pensarlos en su contexto. En este original ensayo, Manuel Cruz echa mano de esta metodología de enfoque para interpretar situaciones de la vida cotidiana, de nuestra condición de seres humanos, de las dinámicas sociales, de los avatares políticos y de la lectura que realizan de los sucesos públicos el periodismo y las redes sociales, siempre con un ojo puesto en el caso particular y otro en una escala más amplia: la cultura, la historia y la experiencia vital. El resultado es un personal retrato de la sociedad española y del mundo contemporáneo que no se apega a lo que se da por obvio, por sabido, ni a lo que dicta el sentido común, sino que se atreve a repensar los cánones, las normas y los paradigmas establecidos. Un retrato, en definitiva, que atraerá a los amantes de la filosofía y a todas aquellas personas que gustan de mirar con espíritu crítico cuanto les rodea.
En esta obra, número 22 de la colección Tauromaquias, los autores abordan la figura de Pepe Luis Vázquez, uno de los diestros de más acusada personalidad, mayor inspiración y más altas cualidades artísticas de todo el toreo contemporáneo. Retirado definitivamente de los ruedos en 1959, el impacto de su peculiar manera de concebir la lidia tuvo mucho impacto en el público de su época y su recuerdo aún se mantiene vivo entre los aficionados, como claro ejemplo de su excelencia taurina. El libro se estructura en dos partes. La primera de ellas describe la Sevilla en la que vivió Pepe Luis Vázquez, los rasgos más distintivos de su personalidad, sus relaciones con el ambiente y las instituciones de la ciudad, el contexto taurino en el que se desenvolvió, su personal concepción del toreo, además de la proyección de su figura en la creación literaria y artística de su tiempo. La segunda está conformada por una serie de testimonios de personajes de la vida sevillana y del mundo del toreo sobre su modo de ser, sus gustos y aficiones, sus anécdotas y su peculiar concepto del arte de torear. Acompaña a la obra un CD en el que se puede escuchar la voz del propio Pepe Luis en las conversaciones que el diestro tuvo en su día con el profesor francés François Zhumbield.
Fotografías y extractos de cartas en blanco y negro. Correspondencia entre Félix Rodríguez de la Fuente, Manuel Navarro Brufal y otros pioneros de la Cetrería Moderna Española. Con este libro se pone al alcance de los cetreros, cazadores y demás lectores interesados, esta obra que documenta y clarifica un período de la Historia de la caza y la protección de las aves de presa en España.