Mallorca Musulmana reúne y analiza todos los códices latinos y árabes en torno al repartimento de Mallorca y su transferencia desde al-Andalus a la Corona catalano-aragonesa. Sus referencias se aplican al conocimiento de la estructura urbana de Mayurqa-Mallorca, ocupándose de cuestiones considerables como la población, la economía y la sociedad en ese momento medieval de la historia mallorquina. Llega, de esta forma, a establecer aspectos fundamentales de la historia andalusí del territorio. Se trata del primer catastro conocido de las explotaciones rurales de la Isla de Mallorca, de su reparto entre los mesnaderos reales, punto de partida de la colonización de una nueva tierra que por derecho de conquista tuvo que cambiar de organización administrativa, lengua, religión y costumbres. El estudio abarca desde la antroponimia, hasta la toponimia rural, pasando por cuestiones socio-profesionales y por aspectos que afectan a la organización administrativa que rigió en la Isla durante el período que corrió entre los siglos X y XIII, sin olvidar la producción agrícola-ganadera y su sistema de mercados.
El padre Traggia era una persona profundamente conservadora, partidaria del absolutismo y con una visión teocéntrica de la sociedad. Reclamaba una obediencia resignada a las órdenes de las autoridades, independientemente de la justicia de estas, y veía con malos ojos que los ciudadanos las cuestionaran. En 1812, durante su estancia en Mallorca, percibió una doble intriga. Por una parte, de los filósofos que ponían en peligro España y pretendían cambiar las instituciones; por otra, contra él. Lamentaba que en Mallorca se hablaba contra santos, papas, obispos, clérigos y estados y ninguna autoridad reprimía y castigaba los atentados, por eso decidió exiliarse en Malta. Su testigo, pone en entredicho el conservadurismo y la beatería que generalmente se adjudica a la Mallorca de principios del siglo XIX. Una vez más, la consulta de las fuentes contradice la historia que se nos ha querido contar.
Aquesta obra abasta dos segles de la història del Regne de Mallorca (1350-1550), en els quals es varen produir els conflictes socials més rellevants de tota la baixa edat mitjana mallorquina. Shi analitzen aspectes tan incidents en la vida dels mallorquins medievals com el desmesurat endeutament de la Universitat del Regne, la relació entre el poder i la comunitat de súbdits o governats, les crisis financeres, les causes del malcontentament popular que a vegades es varen traduir en enfrontaments armats com la revolta del 1391, lalçament forà del 1450 o la Germania del 1521, conflictes que palesen una presa de consciència dels drets dels governats, que ens descobreixen una línia de pensament avançada, dins aquella època, pels sectors populars més capdavanters, i que ens revelen una concepció respecte de les regles que han de presidir la convivència entre governants i governats, que, tot i restar amarada de reminiscències feudals, revela una caracterització de la mallorquinitat sedimentada en una idees socials ben vigents.