Nueva York fue durante tres décadas los años sesenta, setenta, ochenta la ciudad de la libertad, del sexo, de la vanguardia y, naturalmente, de las transgresiones como vía de conocimiento libre hacia una deseada plenitud humana, sin tabúes. Aquella Nueva York fue la capital de la segunda mitad del siglo xx, una capital que murió finalmente en la misma Nueva York con los atentados de las Torres Gemelas. Este libro es un paseo literario por la ciudad que arropó el talento creativo de Andy Warhol y asistió al nacimiento del pop y el underground; que encontró en Allen Ginsberg a su poeta más representativo mientras adoptaba a William Burroughs como el maldito por excelencia; que vibró con las canciones de Morrisey y Nico; que idolatró a Lou Reed y Patti Smith; o que se enamoró del extraño idealismo de Lennon y del tumulto en revuelta de Basquiat. Joe Dalessandro, el primer sex symbol masculino, Robert Mappelthorpe, el genial fotógrafo de la belleza viril, y el hermoso y desdichado Truman Capote desfilan por estas páginas junto con figuras como David Bowie y Mick Jagger, cuyas respectivas obras y personalidades influyeron, directa o indirectamente, en la vida libérrima de aquella mítica Nueva York, aunque no fueran más que ocasionales visitantes. Luis Antonio de Villena nos ofrece una crónica apasionada y personal de un tiempo que tiene como sustrato motriz el universo beat y el universo hipster. Como el propio autor señala: «Nueva York fue el emblema de todos los avances del arte, la literatura y la libertad para nuestro mundo todo, recogiendo los ríos contraculturales que habían irradiado desde California, pero volviendo más urbano, más radicalmente urbanita, lo que un tiempo (como parte del ecologismo) se quiso más campestre y cercano a una idílica naturaleza, que acaso ya apenas exista. Esa Babilonia maldita y hermosa es ahora en algunos de sus nombres testigo nuestra prioridad, nuestro afán de análisis y ¿por qué no decirlo? nuestro grano de nostalgia apuntando tenuemente a un futuro que no sé si tendremos o merecemos siquiera. Nueva York / Babilonia: sabiduría, cultura, moda, delicia, sexualidad, música, cine, poemas y desenfreno. Un plan de mundo feliz (creo) prácticamente ya abolido o casi abolido».
"Partiendo de la muy cimentada teoría de que todo poema es intraducible pero puede traducirse (es decir, que la traducción es una aproximación), he intentado traducir los poemas simbolistas con fidelidad y con libertad, al tiempo. Fidelidad porque pr
Un retrato de época donde Luis Antonio de Villena viaja al Madrid maldito.Luis Antonio de Villena rinde aquí, en Malditos, su última novela, un homenaje a una época y a unos personajes en verdad memorables: el legendario Madrid de la «movida» de los años setenta y un grupo de jóvenes que, alrededor de Emilio Jordán, se lanzan a la aventura de vivir sin límite en busca de la libertad absoluta.Así, descubren la noche, la droga, el alcohol, la homosexualidad y el amor en todas sus facetas, del sublime al más canalla. Con una prosa sabia, de sostenido poder cautivador, Luis Antonio de Villena nos ofrece un magnífico retrato de época y pone en pie una seria de personajes que perviven en la memoria del autor.
Todos dejamos rastros en la vida, cuando de una manera u otra nos desvanecemos. Y es algo que parece nos ocurre a todos. No sé si es o no borgiano (acaso sí) pero todos somos materia del olvido. Y sólo esas pistas o rastros salvan, a veces, lo casi insalvable? Así hallé estas notas de desventura de la vida final de Aníbal Turena, que escribió, allá por el año 1950, cuando remontaba el río Paraná sin un destino cierto. «¿Qué hago yo y qué soy yo? La vida me cansa infinitamente y, sin embargo, algo hay en ocasiones en el vivir (un atardecer, un rostro) que nos trae como el abrigo tibio de una esperanza. Como quien no podría desdecir el horror, pero ciertamente sabe que hubo momentos luminosos.» Aníbal Turena (personaje de otras obras de Villena) es en esta novela un ser ya en el límite.
Juan Luis Panero Jaime Siles Juan Pablo Zapater Bernardo Schiavetta Aurelio Asiain Vicente Gallego Álvaro Valverde Felipe Benítez Reyes Vicente Valero Luis García Montero Alejandro Duque Amusco Rafael Courtoisie Josefa Parra César Simón Jenaro Talens José Eugenio Sánchez José María Álvarez Silvina López Medín Antonio Cabrera Bruno Mesa Lorenzo Oliván Vicente Gallego Miguel Ángel Velasco Carlos Marzal Javier Cano Guillermo Carnero Joaquín Pérez Azaustre J. A. González Iglesias Vicente Valero Carlos Fonseca Grigsby Cristina Peri Rossi Javier Vela José Luis Rey Sergio de Copete Joaquín Pérez Azaústre Álvaro García Juan Vicente Piqueras Antonio Lucas Elena Medel Óscar Hahn María Gómez Lara Víctor Rodríguez Núñez Carla Badillo Coronado José Ramón Ripoll Sergio García Zamora Ben Clark Luciana Reif
A lo largo de sus casi treinta años dedicados al mundo de las letras, Luis Antonio de Villena no sólo ha publicado numerosos volúmenes de poesía, novela o ensayo, también ha encontrado tiempo para escribir artículos (largos y cortos), prólogos y crítica literaria para diversas revistas, periódicos y otros medios. El presente volumen reúne una serie de textos, de origen diverso y género misceláneo, sobre escritores, pintores y sus obras, emparentados de un modo u otro con esa gran corriente literaria y estética surgida en Europa a finales del siglo xix y conocida como el Fin de Siglo. «El fin de siglo fue teatral y apasionado, gesticulador e idealista, decadente y trágico, tremendamente intenso y atormentado, buscador de vida -la vida en lo que tiene también de callejeo, de hampa, de bohemia-, y a la par denostador absoluto de esa misma vida, entendida en su modo más burgués», dice Villena en el prólogo. «Máscaras y formas del Fin de Siglo es un libro de acercamientos varios -novelistas, pintores y poetas-, siempre con un ansia de totalidad. Es decir, sin perder de vista que nos referimos a un orbe amplio y coherente, que quiso ser a la vez clásico, moderno y destructivo. (...) Este libro sería el segundo tomo de lo que por hoy es una trilogía (aunque aumentará) formada por Corsarios de guante amarillo, Máscaras y formas del Fin de Siglo y Los andróginos del lenguaje, todos ellos publicados o pronto republicados por Valdemar. El tomito Diccionario esencial del Fin de Siglo debe considerarse, ahí, como el prólogo orientador a esta trilogía abierta».
IMÁGENES EN FUGA DE ESPLENDOR Y TRISTEZA es inevitablemente (el título hace más que sugerirlo) un libro de versos largos y elegíacos. Como se sabe, no hay elegía sin alto amor a la vida. Yo soy y he sido tan vitalista, tan ferozmente vitalista como tanático. Cosas de la biografía. El sexo ardiente y la nostálgica despedida se funden en estos poemas con largos abrazos Y es un libro de imágenes y sobre imágenes. He querido que muchas fotografías y algunos lienzos, fueran no sólo el arranque sino el complemento de casi todos los poemas. Los que van ilustrados pretenden demostrar que el cuadro o la imagen no actúan contra el poema, sino que lo complementan. Paso y repaso imágenes de vida e historia. Las leo, entro en ellas. En tal línea es un libro de retratos literarios y de retratos íntimos. Y el cibersexo aparece como nuevos pasión y sueño. Como fascinación y condenación en un mundo futuro o no tan futuro cada vez menos humano. LAdeV
Nacido en Cuenca del Ecuador en 1968, con seis poemarios a su haber, y con una trayectoria dividida entre la literatura y la crítica de arte, Cristóbal Zapata es en palabras de Luis Antonio de Villena, cuyo prólogo acompaña esta edición «uno de los mejores poetas del Ecuador de ahora mismo, sabio y fértil, además de erótico». «La fertilidad (bien clara para el lector) continua Villena se la da al poeta, cuando lo es, su propio impulso natural, eso que puede decirse la Musa. La sabiduría es el manejo diestro de todas las tradiciones poéticas, dentro y fuera del idioma, para formar la novedad no ex nihilo, como pretendió cierta vanguardia quizás atractiva pero obsoleta, sino de la lectura personalizada y personalizante de esa múltiple tradición o de las partes que más te convenga para conformar tu voz. Cristóbal Zapata es claramente un poeta con voz y dicción, en una poesía que aúna cultura y vida o a la par, desbordante sensualidad y pasión de belleza y realidad». «No conocemos aun suficientemente la poesía ecuatoriana concluye el prologuista, pero tras esta lectura no vamos a olvidar a Cristóbal Zapata como un notable poeta del siempre ahora mismo».