Aquestes històries, publicades originàriament al setmanari britànic The New Age i recollides poc després en el que va ser el primer llibre publicat en vida per lautora, lany 1911, van ser inspirades per lestada de Mansfield en un balneari de Bad Wörishofen, a Baviera, on la seva mare lhavia enviat el 1909 després d'una sèrie de relacions sexuals escandaloses per a lèpoca que van desembocar en un matrimoni "inadequat" i en un embaràs extramatrimonial, el fruit del qual va perdre precisament durant la seva estada a la pensió alemanya. La majoria dels tretze relats d'aquest recull reflecteixen la relació entre els clients alemanys de la pensió que mengen constantment, suen i parlen de les seves malalties i la jove narradora anglesa, reservada i exigent, però alhora vulnerable, que comenta amb sarcasme el seu xoc amb els alemanys a causa del menyspreu della pels valors tradicionals. De fet, la majoria de les històries parlen de la incomunicació: sobretot entre homes i dones, però també entre classes socials i entre països. El poder de les imatges i lhabilitat amb què les utilitza és el que transmet la connexió més forta entre En una pensió alemanya i lobra posterior de Mansfield.
Nestes tres relatos, As fillas do defunto coronel, Estar no ceo e A festa no xar-dín, Katherine Mansfield, unha das escritoras máis innovadoras da literatura do século XX, arremete contra o concepto victoriano de familia, a visión romántica do amor e mesmo a falacia humanista sobre a coherencia e unidade do ser. Gran parte da obra desta escritora novacelandesa, que dedicou boa parte da súa vida a combater as restrictivas normas sociais e sexuais do momento, céntrase en explorar as dualidades e ambigüidades agochadas na mente humana. As historias das protagonistas de As fillas do defunto coronel coinciden non só pola súa denuncia dunha sociedade perversamente deseñada para limitar as posibilidades de desenvolvemento das mulleres. Tres contos que reflicten de modo xeral a discriminación á que se ven sometidas as mulleres na sociedade de principios de século, ao tempo que critica, de xeito implícito, a represión exercida desde institucións como a familia e o matrimonio; ademais de analizar os aspectos máis escuros e irracionais do inconsciente. Ao amosarnos sempre os seus personaxes femininos alienados perante o debate entre as imposicións externas e os seus desexos, Mansfield ataca os convencionalismos ríxidos no que respecta aos papeis normais asignados ás mulleres.
Los Sheridan preparan una fiesta en el jardín de su casa. Laura la hija pequeña se entera de la muerte de su vecino Scott. ¿Se suspenderá la fiesta en el jardín? Eso es lo que espera la joven. Relato sutil y prodigioso, el último que publicó en vida la magnífica autora neozelandesa considerada por muchos como una de las más importantes escritoras de relatos de todos los tiempos. La delicadeza que transfiere a los personajes de sus cuentos y su capacidad para condensar en gestos e imágenes una pluralidad de conciencias y sentimientos, todo ello entrelazado con meditaciones sobre las diferencias entre clases sociales, la vida y la muerte, la ilusión y la realidad.
There was not an inch of room for Lottie and Kezia in the buggy. When Pat swung them on top of the luggage they wobbled; the grandmothers lap was full and Linda Burnell could not possibly have held a lump of a child on hers for any distance... Bliss is a modernist short story by Katherine Mansfield first published in 1918. It was published in the English Review in August 1918 and later reprinted in Bliss and Other Stories. The story follows a dinner party given by Bertha Young and her husband, Harry. The writing shows Bertha depicted as a happy soul, though quite naive about the world she lives in and those closest to her. The story opened up a lot of questions, about deceit, about knowing oneself and also about the possibility of homosexuality at the start of the 20th century. The story gives us a bird's eye view of the dinner party, which is attended by a couple, Mr. and Mrs. Norman Knight, who are close friends to Bertha and Harry. Guest, Eddie Warren, is an effeminate character, who adds an interesting mix to the party.
El áloe, se sitúa en Nueva Zelanda y dramatiza las disyuntivas de la vida colonial a través de la narración de la mudanza de la familia Burnell desde Wellington a un pueblo rural. Aunque la familia Burnell sólo se mueve a «seis millas» de la ciudad, el movimiento no es intrascendente, sino que provoca una ruptura con su anterior forma de vida. Bajo el barniz armonioso de la vida de los Burnell se mueven débiles corrientes internas de agresividad y desgracia. El espectro inquietante de una misteriosa planta de áloe y un pato sacrificado en su bien cuidado jardín sugieren que la familia oculta el origen de la brutalidad y la ignorancia hacia otra forma de vida que fue suprimida y negada, la de los maoríes, legítimos dueños de aquellas tierras colonizadas. La novela describe una situación parcialmente autobiográfica y el desasosiego de Mansfield por su pertenencia a la casta de los invasores. Una de sus primeras amantes fue, de hecho, la maorí Maata Mahupuku.
En mayo de 1909 Katherine Mansfield se casó con un profesor de canto, al que abandonó la misma noche de bodas para fugarse con un violinista. Un mes después rompieron su relación y ella descubrió que estaba embarazada. Su madre la llevó entonces al balnea
Amanece en la bahía de Crescent, en Nueva Zelanda. Vuelve la luz, baña la tierra y el mar, despiertan los animales y los humanos. Todo parece cobrar conciencia: un charco de agua salada, un arbusto, una gata, hasta un bebé de meses. Todo tiene voz. Los habitantes de la colonia veraniega despliegan, o callan, sus menudencias, sus juegos, sus recuerdos, los sueños que no han cumplido y los que algún día cumplirán. Al final del día todo queda en calma. De Katherine Mansfield dijo Virginia Woolf que tenía el único estilo que envidiaba. En la bahía, publicado en la revista London Mercury en 1922, es uno de esos relatos que, precisamente, que suscita la envidia de cualquier escritor.