32. La sabiduría y Jesucristo En este cuaderno se examinan detenidamente los últimos desarrollos de los escritos sapienciales sobre la Sabiduría de Dios y sus repercusiones en la presentación de Cristo en el Nuevo Testamento. ¿Cómo se hace Dios presente entre los hombres? Esa es precisamente la cuestión planteada por la Sabiduría y Jesucristo
Una visión accesible de la trayectoria y la importancia de una de las figuras más influyentes, complejas y carismáticas de la historia. La relación más completa de la vida de Jesús, con mención a milagros y otros episodios extraordinarios.Obra de referencia esencial para cualquier biblioteca. La vida de Jesús, su contexto social y político, sus enseñanzas y las diversas percepciones, tanto del propio Jesucristo como de sus contemporáneos y de las generaciones siguientes hasta el presente: una recopilación completa, erudita y ampliamente ilustrada sobre este gran hombre. El autor recurre a los testimonios bíblicos y otras referencias con el fin de desentrañar muchos de los misterios y confusiones que envuelven la vida del Jesús histórico. El libro se divide en cinco secciones: El Escenario, en el que se ofrece un completo retrato de todos los aspectos de la sociedad palestina en la época de Jesús; La Vida, donde se siguen todas las etapas de la vida de Jesús y se repasan sus hechos; La Doctrina, en la que se trata el mensaje y las creencias de Jesús; Interpretaciones, en donde se presenta un amplio repaso de las muchas maneras en que ha sido visto Jesús a lo largo de los siglos, y Jesús en el arte, una sección ampliamente ilustrada dedicada a la cambiante imagen de Jesús en el ámbito artístico a lo largo de los siglos, realizada por una experta en iconografía cristiana.
Gracias a Pablo, también nosotros somos cristianos aunque no seamos de origen judío. Esta afirmación, en el inicio del presente libro, nos invita a descubrir, a lo largo de sus páginas, la fuerte personalidad de este gran apóstol, y seguir las apasionantes vicisitudes de su vida. Para profundizar, a partir de ahí, en el sentido de su labor misionera, y en el rico mensaje que nos llega sobre todo a través de sus cartas. Aunque parezca lo contrario, Pablo, en realidad, sigue siendo para nosotros en muchos aspectos un desconocido. Acercarse a él y conocerlo mejor supondrá, sin duda, un valioso enriquecimiento para nuestra vida cristiana. Jordi Latorre Castillo (Barcelona, 1958), sacerdote salesiano, doctor en Teología Bíblica, es profesor de Sagrada Escritura en varios centros superiores de estudios, al tiempo que ha participado en numerosas escuelas de catequistas y anima frecuentemente retiros y tandas de ejercicios espirituales para jóvenes y adultos.
La novela consagratoria de Afonso Cruz, Premio de Literatura de la Unión Europea, elegida Mejor Libro del Año por Time Out Lisboa y por los lectores de Público. Una pequeña aldea del Alentejo se transforma en Jerusalén gracias al amor de una muchacha por su abuela, cuyo mayor deseo es visitar Tierra Santa. Un profesor «paralelo a sí mismo», una inglesa que duerme dentro de una ballena, una chica que lee westerns y cree que la Virgen María sustituyó a su propia madre, son algunos de los personajes que conforman una historia conmovedora e irónica sobre las cosas fundamentales de la vida: el amor, el sacrificio y la cerveza. Reseñas:«Afonso Cruz se convierte en una exigencia para quien no quiera perder detalle del rumbo que tomará el futuro de las letras portuguesas.»PNETliteratura.pt «Un verdadero escritor, tan original como profundo, cuyos libros maravillan al lector, obligándolo a apartarse de las certezas corrientes y a abrirse a nuevas realidades.»Jornal de Letras «No voy a descansar hasta que todos los lectores descubran a Afonso Cruz... Vuelve mi alma lujosa: paso a tener joyas en la imaginación.»Valter Hugo Mãe «He quedado totalmente entusiasmada-prendida-arrebatada-consternada con el libro de Alfonso Cruz, Jesucristo bebía cerveza.»Marta Ramoneda, Librería La Central
El título de este libro quiere decir tres cosas: la primera, que Jesucristo debe ser un personaje de la escuela española y no lo es. La segunda es que «resulta inaceptable que en el año 2000 haya todavía más de 113 millones de niños sin acceso a la enseñanza primaria y 880 millones de adultos analfabetos» (Foro Mundial sobre la Educación, Dakar, Senegal, 26-28 de abril de 2000). Pues bien, así dice el evangelio de san Mateo 25,45: «Os lo aseguro: cada vez que dejasteis de hacerlo con uno de esos más humildes, dejasteis de hacerlo conmigo». Y la tercera es que muchas religiosas y religiosos, ¡y laicos! -mediante sus escuelas católicas-, han llevado a Jesucristo y su Evangelio «por todo el mundo» (Mc 16,15). Le oyeron decir un día «sígueme» (Mt 9,9) y consagraron sus vidas a la escuela católica. Pero seguirle no es fácil, y Jesucristo mismo advirtió de la dificultad de distinguirle en los ignorantes, hambrientos, sedientos, pobres, encarcelados, inmigrantes (Mt 25,31ss), y no donde falsos profetas le señalan una y otra vez y no está (Lc 17,20-23). Así que le ponemos falta donde no hay escuela o no es de las nuestras, y sin embargo puede que él asista puntualmente a donde están sus hermanos más humildes y hasta puede que se aleje de nuestras clases. Afortunadamente, el Espíritu del Señor llena la tierra; percibir esa otra presencia suya -no institucional, gratuita, llena de gracia- nos es muy urgente. La teología de la educación, como teología pastoral, no pretende investigar en el depósito de la Tradición cristiana -ni siquiera en la Escritura- los ideales y proyectos de la revelación divina sobre la familia, la sociedad, el trabajo, la educación, la escuela, etc., para luego realizarlos en la vida. Más bien procede a la inversa: desde la realidad actual concreta busca comprender el soplo del Espíritu, el aliento divino que tampoco hoy cesa de animar la salvación del género humano. Es decir, la teología pastoral (y con ella la teología de la educación) se hace; no se da ni se aprende una vez hecha. No hay piloto automático en ninguna tarea de la Iglesia, y menos entre los ámbitos más seculares, como el de la educación.
Evangelio de Jesucristo según san Juan. I ? El Libro de los signos (Jn 1?12). Este Cuaderno quiere ayudar a recorrer la primera parte del evangelio, el ?Libro de los signos? (Jn 1?12). Al hablar de ?signo?, Juan no pone el acento en lo extraordinario de los gestos llevados a cabo por Jesús, sino en el sentido que hay que darles. Los cuenta para que el lector crea y, al creer, reciba la vida. Ésta es una primera entrada a un relato que muy a menudo intimida por su altura de miras y su estilo. Evangelio de Jesucristo según san Juan. 2 ? El Libro de la Hora (Jn 13?21). Con la perspectiva de la cruz, el tiempo se dilata y, en los discursos de despedida, Jesús ofrece a sus amigos las claves de comprensión de su identidad y su misión. También es para ellos el momento de la decisión, en el que se verifica el seguimiento. De la cena antes del arresto a la comida a orillas del lago tras la resurrección, una sola pregunta: ?¿Me amas?? Vivir, morir, vivir: es la Hora en que el Padre es glorificado en su Hijo, la Hora en que Jesús ama a los suyos hasta el extremo, la Hora del anuncio de las persecuciones futuras y del envío del Paráclito.
La persona de Jesucristo La finalidad de estas guías de lectura es contribuir a que en los participantes de los grupos bíblicos pueda surgir cuanto antes la siguiente convicción vivida: Dios tiene algo que ver con nuestra vida, y nuestra vida tiene algo que ver con Dios. Lo que se pretende con ellas es contribuir a que pueda producirse en los que las utilizan esa luz reveladora que hace ver y decir: ?¡Ahora, sí! ¡He acertado! Veo y percibo que la Biblia y la vida tienen la misma raíz: Dios?.
Recorrer un evangelio se puede hacer de muchas maneras. La finalidad de este trabajo es ante todo iluminar los pasajes que aparecen en la liturgia del año B. El texto de san Marcos se va desgranando en ella al ritmo de los domingos del tiempo ordinario. La proximidad del Reino de Dios en el corazón de lo cotidiano es lo que se proclama y propone a los discípulos como horizonte. En la medida en que el oyente de ayer y de hoy se identifica con el retrato de discípulo esbozado por Marcos, es invitado, por una parte, a una lucidez sobre sí mismo y sus debilidades (especialmente la cruz) y, por otra, se le anima a la fidelidad (el Crucificado ha vencido a la muerte).
El beato Juan Duns Escoto (1266-1308) es uno de los maestros más sobresalientes en filosofía y teología medievales. Su figura y su pensamiento están adquiriendo gran relevancia actualmente tanto en filosofía como en teología. Pablo VI y Juan Pablo II lo definieron como «el cantor del Verbo encarnado y del Primado de Cristo», «el defensor y adalid de la Inmaculada Concepción de María». Al cumplirse este año el séptimo centenario de la muerte del llamado Doctor Sutil y Doctor Mariano, la BAC publica su pensamiento original sobre Jesucristo y María, con textos tomados de la obra crítica de la Comisión Internacional de Roma (edición vaticana). Esta obra de Escoto, genial y profunda, en la que se ensamblan maravillosamente la persona de Jesucristo y la vinculación de María en la historia de la salvación, es ciertamente una gran aportación y un buen servicio al lector de lengua española, pues se trata de un maestro clásico y original en cristología y mariología.
Ésta es una herramienta para conocer quién es Jesucristo, para descubrir su actualidad y su significación presente. Para que no resulte un personaje abstracto o lejano. Para encontrarse con él desde las circunstancias y contextos personales.