Entre el diario íntimo y la novela, el viaje sentimental, la autoficción y el ensayo, este libro nos propone el triunfo de la literatura. Un narrador, que firma sus libros como Rosario Girondo, escribe un diario personal y lleva tan lejos su mal de Montano, está tan enfermo de literatura, que la ficción inicial (la creación de un personaje obsesionado por el porvenir de la literatura y dedicado a descifrar el arte de los diarios personales de sus escritores favoritos) acaba transformándose en una realidad cuando el autor se convierte en carne y hueso en la literatura misma, y entra a formar parte de una sociedad secreta de conjurados contra los enemigos de lo literario.
El héroe moral del escritor y doctor Pasavento es Robert Walser, de quien admira su afán por pasar desapercibido y la extrema repugnancia que le producían el poder y la grandeza literaria. Perseguir el destino de este escritor significa para Pasavento retirarse del mundo, por lo que un día desaparece. Cree que indagarán, pero no le busca nadie. Recurrirá entonces a la estrategia de la renuncia al yo: el acto extremo con el cual algunos escritores se aseguran de captar el destello de la vida inexpresable, no sofocada por el poder. Le veremos renunciar y hasta creer que está encarnando por sí solo la historia de la desaparición del sujeto en Occidente. Y luego, de forma algo contradictoria, se pregunta si será capaz de vivir sin que nadie se acuerde de que existe. Viaja al manicomio suizo donde Walser vivió tantos años apartado del mundo y se acerca al ejercicio de un arte en el que su escritor más admirado fue un consumado maestro: el arte de convertirse en nada.
«¿Qué escribes?», le preguntaron una tarde a Enrique Vila-Matas. El escritor vivía, tras Doctor Pasavento, en una permanente sensación de camino clausurado, pues sentía que había llegado al final de un cierto recorrido y ante él se abría un abismo. «Escribo el título de un libro», respondió. El título era Exploradores del abismo. En los días que siguieron, comenzaron a surgir una serie de relatos relacionados con lo que sugería ese título, historias que protagonizan seres al borde del precipicio, quienes lo estudian, investigan y analizan. Los relatos de este libro buscan puentes en un admirable abismo, historias cruzadas por la enigmática y sinuosa silueta de un equilibrista, cuyo recorrido va trazando el hilo que liga el conjunto de relatos que componen este regreso de Enrique Vila-Matas a la narrativa breve, pero también al libro inclasificable, tan alejado de la novela convencional como del típico conjunto de cuentos cerrados y correctos.
Invitado en Lyon a un simposio internacional sobre la novela, un doble del escritor Vila-Matas es dejado por un taxi en su hotel sin que allí nadie le dé la bienvenida. En la soledad de su habitación redacta una teoría general de la novela, incidiendo especialmente en los cinco elementos «irrenunciables, imprescindibles» que deben reunir los textos para pertenecer al nuevo siglo, mientras la organización que le ha invitado a Lyon sigue sin ponerse en contacto con él. De regreso a Barcelona, le parece descubrir la futilidad de todo ensayo y de todo viaje y quizás incluso la futilidad de todo, de modo que acabará destruyendo la teoría, si bien ésta podría servirle a alguien para escribir Dublinesca.
El esperado regreso de Vila-Matas a la novela: un homenaje a la literatura en un tiempo de cambios. Samuel Riba, editor literario retirado, vencedor del alcoholismo y aprendiz de hikikomori, ha decidido abandonar su atrincheramiento barcelonés. En el ocaso de la era Gutenberg, cree que hallará el mensaje último de la cultura escrita pisando las calles de Dublín, celebrando el Bloomsday, visitando el centro secreto del Ulises de Joyce. Pero ha tenido un sueño premonitorio en el que se ve a sí mismo llorar, desesperanzado y ebrio, tras haber brindado en un viejo pub por el fin de la literatura. Aterrado por lo que pueda esperarle, emprende el viaje con un séquito de amigos escritores, con la esperanza de encontrar las claves del genio artístico. La crítica ha dicho...«¿Cómo un libro tan negro llega a convertirse en una lectura tan excitante? Es el secreto de Vila-Matas, que no deja nunca de sorprendernos.»Maurice Nadeau, La Quinzaine Litteraire «No hay que ser muy avezado en letras para notar, desde las primeras páginas, que Dublinesca es una verdadera obra maestra.»Santiago Gamboa, El Espectador
Enrique Vila-Matas recupera uno de sus volúmenes más emblemáticos, con más de treinta ensayos que configuraron su paisaje narrativo posterior. El viajero más lento recoge un macrocosmos fundacional vilamatianode ciudades, personajes, lecturas, conversaciones, situaciones reales, invenciones y escenarios. Con dos piezas inéditas, constituye, además, una hoja de ruta con las claves imprescindibles para identificar aquello que se convertiría en capítulos, historias y personajes de sus libros posteriores. Un alegato a favor de la libertad creadora del escritor, del lector como continuador del viaje, de los libros como objetos vivos y del valor literario de las ideas en proceso como germen latente de obras que se disparan, como hizo ésta, en múltiples direcciones.
Dieciséis relatos que conforman una singular y heterodoxa breve historia de España. Cada uno de los cuentos que componen este libro oculta una cita de Kafka, quizás el hijo sin hijos por antonomasia, epítome del individualismo y, a la vez, de la indiferencia. Todos los personajes presentados aquí se sustentan en sí mismos, podrían ser máquinas solteras -aun estando casados- y permanecer atados a la realidad solamente con un hilo de araña. No obstante, tejen también el tapiz abreviado y portátil de una particular historia de España que cubre apenas 41 años, la edad de Kafka cuando murió en Kierling. La crítica ha dicho...«Aviso para escritores potenciales, debutantes o consagrados: si quieren saber dónde está la literatura y si es posible renovarla, lean a Vila-Matas.»Le Magazine Littéraire
En la colección de literatura infantil «Mi primer» los grandes de la literatura se enfrentan al público más exigente... ¡los pequeños lectores! Disfruta ya de la lectura de tu primer Enrique Vila-Matas: Niña. La colección «Mi primer» se compone de historias originales escritas por nombres relevantes de la literatura de adultos para leer en familia con los más pequeños de la casa. En Mi primer Enrique Vila-Matas la pequeña y asustadiza Niña te descubrirá el gran misterio del alfabeto mientras cruza los océanos navegando en un barco pirata ¡para acabar desembarcando justo debajo de la cama de sus padres!
Ser joven en París en los años setenta y escribir una primera novela en una buhardilla alquilada a Marguerite Duras en la rue Saint-Benoît es un aprendizaje tan literario que parece inventado. Volver décadas después y retratar a un aprendiz de escritor en un permanente estado de desesperación impostada que imita a sus ídolos literarios en los cafés convierte a esta novela iniciática en un homenaje a la desilusión y la esperanza de los años de juventud. El joven Enrique Vila-Matas pasea por el barrio de Saint-Germain-des-Prés fingiendo ser un escritor maldito, espía la vida de bohemia de sus amigos artistas y escucha desconcertado los consejos de su casera en un francés superior que no entiende, mientras se despide de la poesía y de la felicidad de la escritura imaginaria. Enrique Vila-Matas incorpora un bellísimo prólogo a una de sus novelas más divertidas cuando se cumplen diez años de su publicación. El relato autobiográfico de sus primeros pasos literarios nos invita a adentrarnos en uno de innumerables pasajes parisinos como quien entra, con la elegancia y la naturalidad de su prosa más irónica, en la vida de un escritor que no se acaba nunca.
Novela mosaico escrita hace treinta años y revisitada por el autor en su última obra, Mac y su contratiempo, esta historia sobre las voces que un narrador toma a lo largo de toda su vida nos habla de la única casa que es para siempre: la ficción. Una casa para siempre empieza con un crimen pasional -nocturno y resentido- perpetrado por un famoso ventrílocuo retirado. Pero esta no es la historia del asesinato, ni de la huida del culpable. Esta es la historia acerca de las voces que el narrador, el mismo ventrílocuo, ha tomado a lo largo de toda su vida y de cómo su propia voz ha quedado diluida a la sombra de todos aquellos relatos que alberga en su memoria; una historia que nos enseña cómo la única casa para siempre es la ficción. La crítica ha dicho...«Una nueva y brillante lectura sobre la multiplicación de voces y vidas que somos cada uno de nosotros.»Mercedes Monmany, La Vanguardia «...esa formidable mutación fractal de novela-en-cuentos que es Una casa para siempre.»Rodrigo Fresán, Letras Libres
El viaje sin retorno de Federico Mayol, un viaje metafísico que no es solo una línea argumental. Federico Mayol es un jubilado aficionado al póquer, antiguo militante nacionalista y modélico empresario catalán, padre de tres hijos y esposo devoto. Lleva una vida en apariencia feliz hasta que la realidad irrumpe de forma tan repentina como absurda y cruel: al día siguiente de celebrar las bodas de oro, su mujer le echa de casa. Mayol empieza así un viaje errático en busca de un sentido existencial, perseguido por los fantasmas de la soledad y la muerte; un viaje lineal, una odisea asimétrica cuya meta no es Ítaca, sino cierto aprendizaje sobre la vida y las relaciones... aunque a su edad generalmente ya nadie aprende nada. La crítica ha dicho...«Un trayecto sin retorno El viaje vertical retrata a la generación perdida de españoles a la que se le negó el acceso a la cultura y a la formación tras la Guerra Civil.»Ludmila Vinogradoff, El Cultural, El País
Libros, viajes, música, paseos... Enrique Vila-Matas nos acerca a su universo más íntimo. Llevando al límite la estela de su obra, Enrique Vila-Matas acaba con toda distinción entre narrativa y ensayo en esta maravillosa suerte de diario. Los artículos aparecidos en El País, combinados con las notas del cuaderno personal del autor, van confirmándonos que leerle es emprender una larga conversación donde el escritor barcelonés pone en juego los innumerables recursos de su apasionado compromiso literario. Vila-Matas, siempre a caballo entre lo real y lo ficcional, diluidos uno en el otro, logra aquí asir sus obsesiones e ideas como si de hilos se tratara, y teje con ellos un tapiz deslumbrante, fruto de una de las miradas más lúcidas de la literatura contemporánea. Reseñas:«Es uno de los mejores dietarios que he leído nunca. Que he leído, que releo estos días, en la cama, en el bus, en el café mientras espero. Está lleno de ideas, de momentos felices e inquietantes, de incitaciones en cada página.»Antón Castro, El Heraldo de Aragón «Vila-Matas, de ida y vuelta, una y otra vez, no hace otra cosa que poner aquí de manifiesto la historia de un estilo. Un estilo literario que es también, a esta altura, un estilo de vida y -por suerte para nosotros- un destino que ya sabe imposible de alterar.»Rodrigo Fresán «Si el lector se fiase sin más de mi juicio crítico, me bastaría con afirmar que este Dietario voluble de Enrique Vila-Matas supera todo lo que podíamos esperar.»J.A. Masoliver Ródenas, La Vanguardia
El escritor Andrés Pasavento quiere recuperar la inocencia de sus comienzos, perdida desde el momento en que alcanzó la gloria literaria. Para ello, decide cambiar de identidad, evitar a toda costa encontrarse con conocidos, especialmente con su editor. Ahora es un discreto doctor en psiquiatría que viaja a Campo di Reca para entrevistar al profesor Morante, trasunto de Robert Walser, en un manicomio en la ladera del Vesubio. Dividido entre el deseo de pasar desapercibido y el temor a que nadie le eche de menos, el narrador de esta divertida y trágica novela se deja llevar por sus obsesiones: la fama y el anonimato, el pánico a perder la inspiración creativa, el deseo de ocultarse y el anhelo de ser observado.