«Eça de Queirós es superior, incluso, a mi amado maestro Flaubert». ÉMILE ZOLA Los cuentos aquí reunidos, que incluyen muchos hasta ahora incompletos o dispersos en distintas publicaciones, son una prueba más que evidente de la versatilidad temática de su autor, dotado de un estilo único y de un universo narrativo plural que, en palabras de João de Melo, han hecho que «el nombre de Eça de Queirós no sea tan solo garantía de un talento que lo convirtió en el más grande escritor portugués de todos los tiempos, sino de algo todavía más infrecuente: de un creador por excelencia, de un demiurgo satánico y divino. Y de un genio».
La tragedia de la calle de las Flores no fue publicada hasta 80 años después de la muerte de su autor, en 1980. Esta es la primera traducción de la obra al castellano. El propio Eça, en 1877, escribía a su editor que esta novela era «lo mejor y más interesante que tengo escrito hasta hoy». Esa opinión no parece exagerada a la vista de la obra. Eça transita admirablemente desde el humor hasta la tragedia en una novela, ante todo, de pasión, donde el amor y el sexo aparecen contrapuestos a las convenciones de la sociedad decadente del XIX. Una trama trágica que arrastra al lector y le absorbe desde la primera página. La maestría de Eça le permite a la vez transmitir un retrato eficaz y una crítica feroz de aquella sociedad y acercarnos a cuestiones permanentes, que mantienen inquieto al lector de hoy de principio a fin
Los mejores libros jamás escritos. «Por dentro se movían silenciosamente los deseos, como serpientes tranquilas en su nido.» Amado Vieira es un joven sacerdote que consigue ser trasladado de la parroquia rural en la que ejerce a otra en la bella ciudad de Leiría. Una vez allí, se ve inmerso en un ambiente de libertinaje y desenfreno, al que es arrastrado por un grupo de sacerdotes de la localidad; uno de ellos incluso llega a alojarle en casa de su amante. Es allí donde Amaro conoce a Amélia, la muchacha más hermosa de la ciudad y que devendrá la causa de su perdición. La publicación de esta obra, en 1875, desató un escándalo en el país no solo por el deseo del autor de ridiculizar al clero, sino también por su denuncia de la hipocresía de la sociedad de provincias. La presente edición incluye una introducción a cargo del escritor portugués José Luís Peixoto, quien conduce al lector hacia los entresijos de la obra que consagró a Eça de Queirós como una de las grandes figuras de la literatura universal.
La reliquia (1887) es el relato del viaje realizado a Egipto y Tierra Santa por Teodorico Raposo, quien marcha en peregrinaje a la búsqueda de una reliquia como favor hacia su riquísima y beata tía Patrocínio das Neves. El protagonista esconde bajo su supuesta devoción religiosa en realidad una vida disoluta y cínica, con el único deseo de heredar la fortuna de su benefactora. A medida que Queirós describe las peripecias y el carácter de Teodorico, destripa con crítica mordaz y no poca burla la hipocresía de la sociedad portuguesa de su tiempo. Las críticas hacia el conservadurismo, el clericalismo y la intolerancia hicieron de La reliquia una obra desafiante y perturbadora en su época, aunque ha pasado a la historia de la literatura como una de las más brillantes sátiras de todos los tiempos.«[] No hay un novelista que se haya reído tan libremente como Eça de Queirós del beaterío católico y de las ridiculeces de una religiosidad mezquina y milagrera.»Antonio Muñoz Molina, El País«La modernidad de la novela que la tiene y mucho pues resulta de lo más entretenida y divertida se basa, sobre todo, en el uso de la sátira. Tanto el mundo de Lisboa como el de Alejandría son narrados con un sentido del humor y una evidencia de contraste verdaderamente admirables, además de ir siempre al granoy no consentirse ninguna gracejería facilona.»José María Guelbenzu, Revista de Libros
Los apasionados redactores de la gacetilla literaria de Coimbra persiguen un solo sueño: celebrar el imperio del arte reunidos en el cenáculo de la inteligencia. Llegado de provincias, el pálido y melancólico Artur Corvelo se entrega a componer versos y a soñar su futuro glorioso entre escritores, periodistas y condesas. Tras derrochar la flaca herencia de sus padres, el joven poeta es acogido por dos tías ancianas en un lejano villorrio. Arrastrado al mostrador de una botica y sin más amigos que un viejo libertino caído en desgracia, Artur ve cómo languidece su espíritu. Sólo la muerte fortuita de un padrino lejano le hace finalmente posible ir a la capital, a reclamar la inmortalidad que le corresponde. Armado con sus poemas y el drama Amores de poeta bajo el brazo, verá poner a prueba su ingenuidad y sus ilusiones. Publicada póstumamente, La capital fue objeto, en 1992, de una cuidadosa edición que estableció el texto de manera fiable: es en este trabajo en el que se basa la traducción española que presentamos hoy al lector.
Estos relatos, reunidos aquí en versión íntegra (incluyendo textos hasta ahora dispersos en otros libros), son una prueba más que evidente de la versatilidad temática de Eça de Queirós, creador de un estilo único y de un universo narrativo plural. Son múltiples también sus imaginarios: desde el mundo etno-fantástico de «El difunto» y «El tesoro», o el maravilloso bíblico de «El suave milagro»o «El aya», hasta el irresistible mundo de las mujeres adúlteras de «En el molino» y la crítica de costumbres que confirió a su obra de novelista el fulgor de la universalidad. No resulta excesivo afirmar que también el cuento contribuyó, con pequeñas obras maestras, a la literatura portuguesa. Entre ellas se encuentran, seguramente, algunos de estos cuentos de Eça de Queirós, como «José Matías», «Excentricidades de una chica rubia», «Civilización» o «La catástrofe». El nombre de Eça de Queirós no es tan sólo garantía de un talento que lo convirtió en el más grande escritor portugués de todos los tiempos; hablamos de algo todavía más infrecuente: de un creador por excelencia, de un demiurgo satánico y divino... Y de un genio. João de Melo «Queirós es aún mayor que mi amado maestro Flaubert.» Émile Zola