Dos historias romanas es un díptico novelesco que tiene como doble escenario la ciudad de Roma, aunque en dos épocas muy distintas. «La plaza de piedra» se sitúa en la Roma inmediatamente anterior a la desaparición de los Estados Pontificios en 1870, y «La lección del fantasma» transcurre en la Italia de Mussolini, poco antes de que el país entrase en la segunda guerra mundial.En ambos casos, unos personajes españoles protagonizan peripecias en las que el humor envuelve fantasías, dramas y recuerdos que la memoria impone irresistiblemente a la realidad. Carlos Pujol confirma así la elegancia y la sutileza de su arte narrativo.
Con una prosa rebosante de inteligencia y amable ironía, Carlos Pujol nos dibuja, a través de la mirada del doctor Watson, a un humanizado Sherlock Holmes, con sus paradojas, rarezas y contradicciones, incapaz de resolver los enigmas de su propio corazón. Estos dieciséis cuentos, sobre episodios inéditos de su vida, constituyen un juego delicioso por las fronteras de la literatura y la ficción, pero también un homenaje al célebre detective que nos enseñó a soñar. Así, en estas narraciones se confirma, tras indagar sobre su verdadera personalidad, oculta hasta ahora por los éxitos de su brillante carrera, que Holmes fue mucho más interesante y misterioso que los casos con los que se enfrentó.
«Es posible que las guerras que dejamos atrás nos persigan en forma de imaginaciones extravagantes», dice en un momento de esta novela coral don Emilio su estoico y escéptico narrador, que regresa de Londres a Madrid huyendo de los bombardeos nazis. Una insólita trama de espionaje perturba la tranquilidad buscada y el reencuentro con su hijo Gonzalo, ahora el Poeta de la Falange y alto cargo del franquismo. "Antes del invierno" nos vuelve a mostrar la inteligente literatura de Carlos Pujol y su personal sentido del humor. Una farsa histórica sobre las relaciones familiares en tiempos difíciles, donde la peripecia de unos espías de sainete no oculta una reflexión sutil sobre ese ajuste de cuentas con la vida y con los más allegados previo a la vejez.
Quien disfrutara con Cuaderno de escritura (Pamiela, 1988) y con Tarea de escribir (Pamiela, 1998), conjunto de reflexiones aforísticas y artículos breves en los que Carlos Pujol discurría acerca de la vida literaria con una mirada irónica y llena de sentido del humor, encontrará nuevos motivos en el, hasta ahora inédito, Memorándum. Palabras para escribir (2008). Con Cuadernos de escritura, el lector tiene ahora a su disposición, reunidas en un solo volumen, esas tres entregas, que conforman dos décadas de meditaciones del autor en torno al hecho de escribir. La afición a escribir es incurable; por eso nunca hay que desaconsejar a alguien que siga haciéndolo, aunque lo haga muy mal. Hobby dominguero, actividad privada, literatura del montón, best-seller o gran arte, tanto da, a la larga Dios reconocerá a los suyos. En resumidas cuentas, cada cual escribe como puede y no como quiere. C. P. Carlos Pujol nació en Barcelona en 1936, es doctor en Filología Románica desde 1962, ha sido profesor de literatura en la universidad y desde 1969 ejerce la crítica literaria. Ha traducido a numerosos escritores franceses y anglosajones, entre ellos a Ronsard, Shakespeare, John Donne, Baudelaire, Verlaine, Emily Dickinson, Proust y Hemingway, y ha publicado nueve novelas y diversos volúmenes de ensayos. Su obra poética, que empezó tardíamente en 1987 con Gian Lorenzo, comprende una docena de títulos, de los que forman parte Desvaríos de la edad, Vidas de los poetas, Los aventureros, Fragmentos del Libro de Job, Retrato de París, Esta verdadera historia (Pre-Textos, 1999), La pared amarilla (Pre-Textos, 2002) y Versos de Suabia (Pre-Textos, 2005). Está casado con la pintora Marta Lagarriga y tiene cuatro hijos y quince nietos.
Finalizada la Segunda Guerra Mundial, William B. Kelly, teniente del ejército de Estados Unidos trata de rastrear las raíces germánicas de su apellido original la familia Keller con la visita a una aldea de la Alemania nazi recién derrotada. Su búsqueda no sólo se ve alterada por algún crimen inexplicable, sino que da pie al encuentro del protagonista y narrador de esta entretenida historia con variopintos personajes que representan las diversas aristas del ambiente de posguerra. Con esta novela coral, Carlos Pujol ratifica su inteligente habilidad para construir una narración histórica que, bajo la apariencia de una trama ligera de lectura ágil, encierra una sutil reflexión sobre la cultura y el escepticismo, como contrapesos del poder, la violencia, el nacionalismo y la barbarie bélica.
Verano de 1943. Los aliados bombardean Roma. El régimen de Mussolini se tambalea. El protagonista y narrador de esta novela, Agustín López Beruzzi, il Capitano, recibe en Madrid el encargo de un coronel de viajar como agente secreto a la caótica capital italiana para que ayude a salir del país a un ciudadano británico: nada menos que Bond, James Bond... A partir de este rocambolesco punto de partida, Carlos Pujol exhibe de nuevo en "Los fugitivos" su plena maestría narrativa. Construye una ágil y amena trama de espías, no exenta de parodia y plagada de personajes insólitos, pero enriquece la farsa con una sagaz defensa de la cultura, el humor, la diplomacia y el escepticismo como antídotos contra las guerras, los totalitarismos y los abusos del poder.
Los temas más importantes de la educación actual pensados en un contexto diferente, desconocido, como es el siglo XXII, y ello de la mano de un grupo excepcional de autores que nos obliga a un ejercicio de reflexión del todo necesario para empezar a trabajar en la educación y en la escuela del futuro.
'Magníficat' constituye otra muestra de la grandeza literaria de Carlos Pujol, que cultivó todos los géneros y tradujo decenas de grandes obras de las letras universales. Todo ese gran equipaje intelectual no se convierte aquí en pedantería, sino en una poesía sencilla y a la vez profunda, sobre un aspecto de nuestra tradición cultural la gran figura femenina del cristianismo, que el poeta vincula con cuestiones como el amor, la maternidad, la discreción