Algernon Blackwood (Kent, 1869-1951) pertenece, al igual que M.R. James, E.F. Benson, Lord Dunsany, Machen o Hodgson, a la estirpe que fraguó en el cambio del siglo XIX al XX las bases del relato de fantasmas y la ficción extraña contemporáneas, haciendo evolucionar los viejos espectros vengativos y ensangrentados de la tradición gótica hacia los modernos ectoplasmas y poltergeist. Amante de la Naturaleza salvaje y los mitos clásicos, Blackwood acabará convirtiéndose en un autor popular y una estrella de la radio, medio que utilizó para divulgar sus ideas y relatos fantásticos. Desde joven Blackwood sintió una poderosa atracción e interés por la mística oriental, hinduismo y budismo, y por el espiritismo. Escritor, periodista, viajero, deportista y aventurero, se afilió a los veintiún años a la célebre sociedad ocultista de la Golden Dawn. Publicó relatos fantásticos en diversas revistas, historias que reunió más tarde en libros como «The empty house and other ghost stories» (1906), o el presente volumen, «John Silence, investigador de lo oculto» (1908), con el que adquirió una gran popularidad. Emparentado con otros detectives de lo oculto, como Martin Hesselius de LeFanu, Van Helsing de Stoker o Carnacki de Hodgson, John Silence posee genuinos poderes psíquicos que le permiten moverse en el plano astral o comunicarse telepáticamente con sus clientes, así como algunas características del inmortal Sherlock Holmes. Incluye la presente edición una obra maestra del relato fantástico: ?Antiguas brujerías?, también otras destacadas historias del género como ?Culto secreto?, ?La némesis del fuego? o ?El campamento del perro?. La capacidad de Blackwood para describir poéticas ensoñaciones fantásticas, escenarios naturales que se tornan sutilmente en sobrenaturales, mantiene al lector absorto, hipnotizado e incluso abducido hacia el interior de una vorágine de sueños, deseos y vidas pasadas enormemente cautivadora.
Publicado por primera vez en castellano de forma independiente, Los sauces es considerado por la crítica el mejor libro de Blackwood. También lo fue para Lovecraft, quien dijo del autor que nadie se había acercado «a la habilidad, seriedad y minuciosa fidelidad con las que registra las insinuaciones de anormalidad en ciertos objetos y experiencias ordinarios, o a la sobrenatural perspicacia con la que construye, detalle a detalle, las sensaciones y percepciones completas experimentadas en el tránsito de la realidad a la vivencia o la visión preternaturales».
Las leyendas y relatos que existen sobre los hombres-lobo se remontan hasta la Antigüedad clásica y cuentan en Europa con una larga tradición, que recoge historias tanto de hombres que siendo mordidos por lobos se transforman en éstos como de niños que, criados por lobos y apartados de cualquier relación humana, se comportan como tales, o casos de hombres cuyo profundo contacto con la naturaleza los ha llevado a transformarse en un ser más primitivo o animal. Será el gusto romántico por este tipo de leyendas el que lleve a muchos autores a retomar esta tradición y a reelaborarla, acentuando en la mayoría de los casos los aspectos sobrenaturales y conectándola más directamente con el mundo de lo oculto y lo monstruoso. Esta espléndida y completa antología de Juan Antonio Molina Foix abarca desde los primeros relatos góticos que se conservan los ya clásicos «El lobo blanco de las Montañas Hartz» de F. Marryat, y «Hughes, el hombre-lobo» de S. Menzies, nunca publicado en lengua castellana hasta notables y novedosas versiones más recientes, igualmente inéditas entre nosotros, como «El campamento del perro» de A. Blackwood, «La caza» de P. Fleming, «Tabú» de G. Household o «El gâloup» de C. Seignolle.