Diabólico y papista a la vez, hasta mediados del siglo XX, ésta fue la percepción más común entre el público anglosajón acerca de Richelieu. Frío, astuto y despiadado, gobernaría Francia durante dieciocho años hasta su muerte. Estudios recientes han tenido como resultado una visión más favorable del personaje, y con este incisivo trabajo R. J. Knecht se vale de nuevas investigaciones para reescribir su carrera y logros. Centrándose en su trayectoria política, se nos muestra la naturaleza y mecanismos de poder del cardenal, y cómo éste los empleó, abarcando: su llegada al poder y la oposición que encontró, sus relaciones con la alta nobleza y los protestantes su influencia en la economía gestión de asuntos internacionales y de guerra uso de la propaganda su participación en la conformación del absolutismo en Francia y el mecenazgo en las artes y las letras.