Este libro va destinado tanto a los especialistas en traducción, profesores y estudiantes de las facultades de Traducción y de Filología, como a cualquier interesado en las humanidades en general. Pretende, ante todo, persuadir de la importancia del conocimiento de la retórica en los estudios de traducción, y de su recuperación o restauración en los de filología. Traducción, retórica y literatura, o producción textual, son actividades interconectadas desde que Roma conquistó a Grecia y fue, a su vez, conquistada culturalmente por ella; proyectadas hacia el pasado, literatura y traducción designan a menudo, más o menos confusamente, la misma actividad o ejercicio retórico: leer y escribir sobre lo leído, rehaciéndolo o interpretándolo, en una lengua o en varias, en todos los sentidos de la palabra interpretar: hacer de intermediario para explicar, reescribir, escenificar y, en último término, recrear. Textos de diversas lenguas confluyen aquí con otros de la literatura española, desde Gonzalo de Berceo hasta Juan Marsé.