¿¡Quién será el despiadado monstruo que se dedica a destruir sistemáticamente los ema con el dibujo del caballo sagrado Shussemaru!? Ranma, Akane, Ukyô y Hinako se disfrazan de sacerdotisas sintoístas para salvar el santuario de la quiebra cuando por fin aparece el despiadado criminal... Por otra parte, los pechos de Akane han crecido un poquiiito, pero, sin embargo, ¡los de Ranma chica están como melones! A la lógica disputa "pectoral" que se monta entre los dos prometidos, se le suma la madre de Ranma, Nodoka, ¡que solo consigue complicar todavía más las cosas!