La industria de la publicidad atraviesa un momento de cambio. En una época en la que podemos escoger los medios de comunicación, los canales tradicionales como la televisión, la prensa o las vallas publicitarias ya no son siempre los más apropiados para que una marca llegue al público al que va destinada. Como resultado, las empresas internacionales están optando por poner en práctica campañas más imaginativas y originales con la finalidad de lograr que se hable de sus productos: Microsoft llenó Manhattan de pegatinas de mariposas; Volkswagen fabricó un modelo Polo de hielo y lo aparcó en una calle londinense; y Adidas colgó a dos futbolistas sobre las calles de Tokio desafiando el peligro. Publicidad de guerrilla presenta los mejores ejemplos internacionales de las imaginativas tácticas utilizadas hoy por las grandes marcas, por las organizaciones sin ánimo de lucro y por los individuos para promocionar tanto sus ideas y productos como a sí mismos. El libro incluye 68 campañas, agrupadas según el modo de abordar la publicidad: publicidad urbana, campañas para un lugar determinado, publicidad inteligente, trucos publicitarios y ofensiva en varios frentes.