La violencia no es la manifestación de un rasgo psicológico individual, sino el producto de una serie de factores psicosociales que varían según las características y las normas de la organización o de los grupos humanos en los que se produce. Para estudiar y comprender la violencia hay que situarse en una perspectiva psicosocial contextualizada que tiene en cuenta la interacción entre los diversos actores implicados en ella, mediatizados por el poder, ya sea interpersonal o social, y los valores sociales. Tras realizar un desarrollo teórico-conceptual de la violencia y la agresión, este texto analiza varios tipos y contextos de violencia, como son: la violencia en la escuela; la violencia en el trabajo, desde intentos criminales al acoso laboral o sexual; la violencia de los jóvenes, resaltando en ella la importancia de su carácter grupal; y la violencia de género y sus factores sociales y políticos. Finalmente, se aborda la violencia en los medios de comunicación tanto la ficticia como la real que se emite en los informativos, analizando la problemática reciente sobre las consecuencias y efectos sociales que puede producir.