Escrito en la llamada "era de oro" de la caricatura inglesa -las últimas décadas del siglo XVIII-, este pequeño libro de Francis Grose, Principios de la caricatura, es sin lugar a dudas una obra clave para una historia de la imagen satÃrica, género que cada vez más ocupa la atención de historiadores y de historiadores del arte en relación con la historia polÃtica, social y cultural. En su primera parte, el autor presenta un tratado de fórmulas apropiadas para realizar retratos caricaturizados, sobre la base de una geometrÃa sencilla, cuya práctica ejemplifica a través de una serie de encantadoras ilustraciones. A continuación, en el "Ensayo sobre la pintura cómica", examina cuáles son los recursos compositivos y estilÃsticos que hacen que una pintura o un dibujo muevan a la risa. Las figuras del músico sordo, la seductora añosa, el danzarÃn de piernas torcidas son, asÃ, el objeto de una sátira visual amable que, según piensa Grose, nos permitirÃa conocer y tolerar mejor a nuestro prójimo. El ensayo está precedido por un estudio introductorio escrito por José Emilio Burucúa y Nicolás Kwiatkowski, también responsables de esta traducción. En un cautivante y erudito recorrido por la historia de la imagen satÃrica, los investigadores no sólo valoran el lugar y la significación que en ella ocupan los Principios de la caricatura, sino que también despliegan una historia de las teorÃas sobre las representaciones visuales cómicas y un análisis de su eficacia en relación con la palabra y como instrumento de la polÃtica.