El Estado de bienestar ha sido uno de los referentes más significativos del desarrollo civilizador de la segunda mitad del siglo XX. Resultado de un amplio consenso social interclasista ha posibilitado el crecimiento económico y la estabilidad social en democracia durante décadas, al menos en los países más desarrollados. El que España haya estructurado un sector público clásico de economía del bienestar en un tiempo récord y en un período en el que en otros países se discutía sobre su futuro y, en ocasiones, se recurría a su modificación o reducción parcial, nos sitúa como país de referencia obligada en cuanto al análisis del tamaño deseable del sector público, de sus funciones y de la efectividad de las políticas públicas aplicadas para la consecución del Estado del bienestar. Durante un largo período de tiempo, el modelo de Estado de bienestar mostró su vigor a través de evidentes logros, pero la aparición de desajustes económicos, a partir de los años setenta, incorporó ciertas sombras sobre su capacidad de pervivencia. Los países que, como España, han desarrollado tardiamente sus instituciones de bienestar han acumulado también los desequilibrios en un período menor de tiempo y, en consecuencia, se contempla en ocasiones con perplejidad la sola posibilidad de renunciar a algo apenas conseguido. En este contexto, aparece como imprescindible la reflexión teórica rigurosa y el análisis práctico para reforzar la articulación y coordinación de las diversas instancias públicas y privadas, formales e informales, que configuran lo que algunos autores han denominado «economía mixta o pluralista del bienestar», con el desarrollo del voluntariado, las organizaciones no gubernamentales y la iniciativa social sin ánimo de lucro. La preocupación de la Fundación Hogar del Empleado por las políticas sociales y el Estado del bienestar no es reciente. A principios de los años ochenta inició la reflexión, innovadora entonces en nuestro país, en torno al papel del sector público, los problemas de la crisis fiscal, el Estado del bienestar, el mercado de trabajo, la ecología y la inmigración, de los que son exponente el Simposium Estado y Sector Público en España 1981 y la Colección «Economía Crítica». Este informe nace con la vocación de estar presente, como cita anual de reflexión, en el seguimiento y análisis de las políticas sociales y de bienestar en nuestro país.