A través de esta senda, la autora recorre el arte del siglo xx. Estudia el maniquí metafísico de De Chirico y el satírico de Grosz, la muñeca perversa de Bellmer y la abyecta de Cindy Sherman, el robot rígido de Mondrian y el más humano de Schlemmer, las máquinas amorosas e hilarantes de Duchamp y Picabia y las figuras hiperrealistas de Duane Hanson. El lector descubrirá en este texto hasta qué grado trasparecen la inquietud, el desarraigo o la esperanza en muchas construcciones artísticas que creíamos conocer.