Para abordar la relación entre Pier Paolo Pasolini y la cultura española, la autora de este libro se centra inicialmente en su primera producción poética, de los años cuarenta y cincuenta, época en que no solo resulta preponderante la influencia de Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez, Luis Cernuda, García Lorca o Rafael Alberti, sino también de los poetas catalanes que utilizaban su lengua materna. Por entonces, Pasolini escribía en dialecto friulano y su interés por las experimentaciones lingüísticas le llevó a fundar la Accademiuta en 1945, academia cuyos objetivos eran la búsqueda de una lengua absoluta, pura para la poesía, y promover la cultura de las «pequeñas patrias de lenguas romances». Con este propósito llegó incluso a escribir composiciones definidas como «casi españolas» (Hosas de lenguas romanas) que, sobre una base lingüística marcadamente española, incorporan elementos italianos, friulanos, franceses o catalanes. Por primera vez en España se publica, en el apéndice final de este libro, una selección de los poemas que Pasolini compuso desde la Accademiuta y que firmó bajo el pseudónimo de El Juanero, el ladrón de limosnas. Pero la presencia del influjo español en la obra de Pasolini sobrepasa el ámbito poético y se aprecia en todos los géneros narrativos que cultivó, y no solo en lo cultural, sino también en lo social y político. Aunque la obra de Pasolini ha sido traducida y estudiada en España con cierta asiduidad, no existe todavía ningún trabajo que, desde el campo de la literatura comparada, haya abordado un análisis como el que propone Francesca Falchi en este libro: la importante presencia de la cultura española en la obra de Pier Paolo Pasolini.