Y fuera de ambos viven los cautivadores personajes de esta novela: la amante casada del narrador, Clare Bayes, una mujer condicionada por algo a lo que asistió pero que no recuerda; el amigo Cromer-Blake, homosexual irónico que vive fabricando experiencias intensas para una vejez que prevé solitaria; el ya retirado y sagaz profesor Toby Rylands; el merodeador Alan Marriott, con su perro de tres patas y su conocimientos sobre la "pareja espantosa" que todos tenemos; y mucho otros, algunos extraordinariamente divertidos, hasta llegar al personaje que viene de otro tiempo, el enigmático escritor John Gawsworth. En un mundo de secretos e intrigas, de ritos ceremoniosos y cenas disparatadas, de pasados ocultos y enfermizos presentes, el narrador va tejiendo su propia "perturbación" y su propia historia con la de los habitantes de la ciudad "conservada en almíbar", hasta descubrir que elementos tan dispares como un puente ferroviario sobre un río en la India, unos amantes desdichados, una carrera de espía o la diminuta isla de Redonda, pasarán a formar parte de su vida, marcada ya para siempre por esas relaciones inesperadas de amor y amistad entre todas las almas.
Una novela que se adentra en los mecanismos de la delación y la supervivencia, del dominio y la traición de los semejantes, y que fue, durante mucho tiempo, una de las preferidas de su autor. Sentado junto a una ventana con vistas a un lago cuyas aguas indefinidas, letárgicas, pusilánimes e indecisas le parecen fiel imagen de aquellos que, esperando su muerte, lo rodean en su retiro, el juez Casaldáliga ya no recuerda aquella frase que su padre le repetía: «Has de tener bien presente que un hombre no es nada sin un destino». Un destino que él buscó durante mucho tiempo, hasta que, en 1939, al regresar después de un exilio de tres años en Lisboa, vio claro que el final de la guerra le brindaba una oportunidad para decidir no sólo su destino, sino también el de sus semejantes. De El siglo se ha dicho:«Las oraciones, a veces largas, y parcas en diálogo, comunican el sentido del tiempo, del siglo, que a su vez viene a ser no sólo el siglo en que vive Casaldáliga, en que vivimos nosotros, sino El siglo, el mundo, la vida.»J. H. Abbott, ABC
Un insólito alarde de osadía narrativa. Al igual que en las grandes novelas de aventuras que se escribían a finales del XIX, y a las que Travesía del horizonte rinde cariñoso y también burlón homenaje, esta novela, publicada a los veintiún años, tiene como hilo conductor una atrevida expedición: el capitán Kerrigan, millonario y excéntrico, ha organizado un viaje a la Antártida para hombres de letras y científicos. Pronto adivina el lector que esa travesía no es más que una excusa, o uno de los muchos hilos con los que está tejida esta trama. Construida según el modelo del relato-dentro-del-relato, Travesía del horizonte añade a la aventura marítima de Kerrigan otras historias y personajes no menos novelescos, en deliberada parodia de ciertos maestros del género que van desde Joseph Conrad hasta Henry James pasando por Conan Doyle; y entre pintorescos secuestros y manuscritos misteriosos, señoritas eduardianas y paisajes de navegación, se va desplegando un torbellino narrativo servido por un estilo paradójicamente pausado. Reseña: «Una desenfrenada novela de aventuras ante el espejo de la parodia.» Juan Antonio Masoliver Ródenas
«La belleza de este libro procede, justamente, de su singularidad y convierte la lectura en un juego delicioso y un homenaje a lo extraordinario.»José María Guelbenzu, El País La tradición del relato fantástico, de terror o de fantasmas de la literatura inglesa ha dado cabida a genios como Poe, Bierce o Saki, conocidos fundamentalmente por el cultivo de este género, pero también a otros escritores que, por su corta vida, su interés por otros géneros o simplemente ocupados en otros menesteres, sólo escribieron un relato, solo «dieron un fulgor». A estos autores y a estos relatos va dedicada esta peculiar antología de cuentos únicos, rastreados, seleccionados y recopilados por Javier Marías, cuyos autores son en su mayoría casi completos desconocidos, incluso en sus países de origen y para los amantes del género. Junto a elles una travesura de Javier Marías: un cuento suyo oculto bajo seudónimo. Javier Marías (Madrid, 1951) es quizá el escritor español contemporáneo más admirado fuera de nuestras fronteras. Es autor de una inmensa obra novelística, pero también ha cultivado el relato, el articulismo, el arte de la antología, la semblanza y la traducción. Más de una docena de premios internacionales avalan su carrera literaria. Traducciones de Alejandro García Reyes, Antonio Iriarte y Javier Marías.
Este volumen reúne los noventa y cinco artículos publicados por Javier Marías en el suplemento dominical El País Semanal entre el 8 de febrero de 2015 y el 29 de enero de 2017. Noventa y cinco piezas que ofrecen una instantánea de la realidad, del gran articulista de la prensa española actual. «¿Se puede hacer algo en un mundo en el que contamos con grabaciones, con sonido e imágenes, con máquinas calculadoras más fiables que nunca, y todo ello se refuta con desfachatez? ¿Estamos adormilados, hipnotizados o simplemente idiotizados para creer más a los distorsionadores que a nuestros ojos y oídos, y aun que a la aritmética?», se pregunta el autor en uno de los textos incluidos en este libro. Y concluye su reflexión: «Si es así, rindámonos». Vivimos tiempos en los que no se puede soslayar el triunfo de las radicalidades, de las militancias de todo signo y de los bulos cotidianos; la célebre posverdad se impone a lo real y gran parte de los ciudadanos solo lee, oye o ve a los de su cuerda, atrincherados en la comodidad de un pensamiento coincidente. En estas circunstancias, Javier Marías es un outsider necesario. Con su estilo elegante, su exquisita educación y su gran sentido del humor, lleva a cabo en sus artículos algo infrecuente: matizar, razonar, dar mandobles a unos y a otros cuando lo considera conveniente, no ejercer banderías ni lo políticamente correcto. En medio del ruido global en el que estamos inmersos, las piezas de opinión recogidas en Cuando los tontos mandan resultan indispensables para formarnos una opinión personal sobre gran variedad de temas y para entender el mundo actual. Y confirman a Javier Marías como una de las voces más representativas y valoradas de la auténtica disidencia. Reseñas:«Quien no lea a Marías está condenado.»The Nation «Su mente es profunda, aguda, a veces turbadora, a veces hilarante, y siempre inteligente.»Edward St Aubyn, The New York Times Book Review
Como una nueva perspectiva de sí mismo, Las huellas dispersas es una antología de textos que ensancha la obra de Javier Marías y completa la lectura de Todas las almas, Negra espalda del tiempo y Tu rostro mañana. Las huellas dispersas es una colección de textos de Javier Marías relacionados con su Ciclo de Oxford. Visitan estas páginas los personajes -también sus reversos históricos- de las novelas que, hasta la fecha, lo componen. También se recorren aquí sus lugares ingleses, hasta colarse en el gabinete del autor, alguien que trabaja realidad y ficción y las convierte en literatura. Reseñas:«Marías ha narrado su historia de amor y muerte en Oxford de un modo tan conmovedor como entretenido, en un maravilloso vilo entre lo drástico y lo delicado, entre la comicidad y una elegíaca tristeza.»Frankfurter Allgemeine Zeitung «Divertido, incluso hilarante, y a veces profundo, obsesivo, acuciante, se sale de él embrujado.»Le Monde (sobre Negra espalda del tiempo)
Tras el éxito de Así empieza lo malo (Libro del Año según Babelia), el nuevo libro de artículos de una voz siempre indispensable y brillante. «Quien no lea a Marías está condenado.»The Nation Este volumen reúne los noventa y cinco artículos publicados por Javier Marías en el suplemento dominical El País Semanal entre el 10 de febrero de 2013 y el 1 de febrero de 2015. En opinión del autor, «nos encontramos en una situación de emergencia que obliga a mancharse con la suciedad que esparcen nuestros gobernantes de todo signo. Cuando los abusos no son la excepción, sino la regla; cuando no se da abasto a contrarrestar -qué digo: a señalar- los desmanes y tropelías, entonces no hay más remedio que emporcarse. Ningún combate se libra desde el tendido. [...] Qué más quisiera yo que mirar desde el tendido con aprobación y complacencia, y no soliviantarme con las noticias de cada mañana.» Las piezas recogidas en Juro no decir nunca la verdad conforman una crónica del periodo, no sólo política -pese a que la impotencia y el hartazgo del ciudadano común están omnipresentes, así como las dolorosas consecuencias de la crisis y la falacia de la recuperación económica-, sino también social y cultural: los estúpidos hábitos originados por el uso de las nuevas tecnologías, el lamentable estado de la cultura en España, el cine y la literatura, los excéntricos regalos bélicos de su amigo Pérez-Reverte, los comportamientos incívicos, el adiós a algunos seres queridos y las falsedades interesadas sobre los intelectuales son otros de los temas tratados. En suma, en este libro Javier Marías ofrece una fiel instantánea de la realidad llena de agudeza e ironía. Y nos brinda el impulso y las claves necesarias para pensar por nuestra cuenta en el tiempo en el que vivimos. Reseñas:«Su mente es profunda, aguda, a veces turbadora, a veces hilarante, y siempre inteligente.»Edward St Aubyn, The New York Times Book Review «Las piezas recogidas en Juro no decir nunca la verdad conforman una crónica del periodo, no sólo política sino social y cultural.»Luis Alonso Girgado, Diario de Arousa