A en Robert, com a moltes altres persones, no li agraden les Matemàtiques, perquè no les acaba d;entendre. Però una nit somia amb un dimoniet que pretén iniciar-lo en la ciència dels nombres. Naturalment, en Robert pensa que és un altre dels seus freqüents malsons, però en realitat és el començament d;un recorregut nou i apassionant a través del món de les Matemàtiques. ¿No és estrany de trobar sempre seqüències numèriques mitjançant la simple multiplicació dels uns: 1 x 1 = 1; 11 x 11 = 121; 111111 x 111111 = 12345654321, i així successivament? I això és solament l;operació més senzilla. Durant dotze nits, en Robert somia en sistemes numèrics cada cop més increïbles. Tot d;una, els nombres cobren vida per ells mateixos, una vida misteriosa que ni tan sols el dimoni no pot explicar del tot. Les Matemàtiques no havien estat mai tan fascinants. Aviat, el dimoni li farà abandonar els tòpics i el farà accedir a nivells superiors. I els entén i tot! I els joves lectors també. En cada pàgina, a mesura que anem avançant, els nombres es van tornant cada cop més absorbents. És com si es tractés de màgia. En Robert vol saber més i més, fins que, a la fi, el dimoni li fa comprendre que alguns problemes i algunes paradoxes pertanyen a les altes esferes de la ciència.
La tía Fé viene de visita. Y eso revoluciona a toda la familia Federmann, compuesta por un padre funcionario que para redondear ingresos se pluriemplea, una madre que trabajaba en una tienda de productos ecológicos y ahora es ama de casa, y los tres hijos: Fabian, Fanny y Felicitas. La tía Fé está en las antípodas de esta familia común y corriente. Es una anciana excéntrica y millonaria, tiene una mansión junto al lago Lemán, viaja por el mundo y, a lo largo de su agitada vida, ha conocido la inflación, las quiebras, el despilfarro y la pobreza. En esta visita decide encontrarse con sus sobrinos en un hotel de lujo y queda horrorizada al comprobar su absoluta ignorancia sobre todo lo relacionado con el dinero. Decide entonces darles unas cuantas lecciones básicas de economía con una premisa inquebrantable: no aburrirles. ¿Cuándo se inventó el dinero? ¿Por qué lo utilizamos? ¿De dónde sale? ¿Quién creo el papel moneda? ¿Cuál es el verdadero valor de las cosas? ¿Quién lo decide? ¿Para qué sirven las bolsas? ¿Y los bancos? ¿Cómo funciona un crédito? ¿Y cómo funciona el capitalismo? ¿Cómo se reconoce a un rico y a un pobre? ¿Por qué hay mercado negro y economía en negro? ¿Por qué emiten ingentes cantidades de dinero los bancos centrales? Estas son algunas de las preguntas que la tía Fé les plantea a sus sobrinos, y para responderlas les habla de coleccionistas de arte, prostitutas, millonarios, filántropos..., y reúne en un cuaderno las observaciones inteligentes que sobre el dinero han dejado escritas algunos sabios, como Sófocles, que dijo nada menos: «La peor maldición de la humanidad es el dinero», o Francis Bacon, que dejó escrito que «el dinero es como el estiércol; si no se reparte bien no sirve de nada». Enzensberger, que también es un sabio, ha escrito una novelita didáctica, con aires volterianos, mucha agudeza y un humor delicioso. Ya nos había regalado incursiones pedagógicas en las matemáticas ?El diablo de los números? y en la filosofía ?Reflexiones del señor Z., publicada en esta colección?, y aquí continúa con su vocación de instruir deleitando. Y así, un asunto a priori tan árido como la economía se explica con una amenidad y un ingenio que ayudan a entender los misterios y los secretos inconfesables del dichoso dinero.
A Robert no le gustan las Matemáticas, como sucede a muchas personas, porque no las acaba de entender. Pero una noche él sueña con un diablillo que pretende iniciarle en la ciencia de los números. Naturalmente, Robert piensa que es otra de sus frecuentes pesadillas, pero en realidad es el comienzo de un recorrido nuevo y apasionante a través del mundo de las Matemáticas. ¿No es extraño hallar siempre secuencias numéricas por la simple multiplicación de los unos: 1 x 1 = 1, 11 x 11 = 121, 111111 x 111111 = 12345654321, y así en adelante? Y esto es sólo la operación más sencilla. Durante doce noches, Robert sueña sistemas numéricos cada vez más increíbles. De pronto, los números cobran vida por sí mismos, una vida misteriosa que ni siquiera el diablo puede explicar del todo. Nunca las Matemáticas habían sido algo tan fascinante. Pronto, el diablo le hará abandonar los tópicos escolares y hará que acceda a niveles superiores: ¡y aun así los entiende! Y el joven lector también. Los números, cada página que pasa, se van volviendo cada vez más absorbentes. Es como magia, y Robert quiere saber más y más hasta que, al fin, el diablo le hace comprender que algunos problemas y paradojas pertenecen a las altas esferas de la ciencia.