Nacida para la decisión asamblearia, la Retórica fue derivando hacia la formulación de un conjunto de técnicas con las que convencer a los ciudadanos reunidos en asamblea. De este modo, lo que fue un discurso acerca de la persuasión se convirtió en la técnica de la persuasión por medio del discurso. En los procelosos tiempos de la Reforma y Contrarreforma, el dominico fray Luis de Granada va a redactar un conjunto de reflexiones sobre la Retórica Eclesiástica que encamina a la formación de buenos predicadores, pero que se insertan de forma natural en el decurso de la historia de la teoria literaria, de la oratoria y de la iglesia. Este ensayo ofrece un marco general sobre el que situar la aportación de fray Luis para, a continuación, entrar en el análisis de unos cuantos aspectos relevantes para una correcta comprensión de la doctrina retórica, estilística y pragmática de uno de los tratados más importantes del siglo XVI: la Retórica Eclesiástica o Modo de Predicar.
Como las muchas ramas de un árbol son las diversas religiones en el mundo. Tronco y ramas todas viven, crecen y florecen gracias a la savia, que es la oración. Esto tienen de común todas las religiones: la oración. Fray Luis de Granada (1504-1588) es gran maestro en esta virtud. Su "Libro de oración" es savia que hace florecer y fructificar en santidad la rama del cristianismo en el árbol de la vida. Ha tenido innumerables ediciones desde que fue impreso por primera vez en Salamanca (1554). Libro de perenne actualidad que lleva de los rezos u oraciones a la oración reflexiva, y de la meditación a la contemplación, que es ya unión con Dios.