Alberto García Ferrer narra sus años al frente de la prestigiosa Escuela de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños de Cuba, fundada por Gabriel García Márquez, y según él nacida por el calor de cineastas cubanos y latinoaméricanos, visitada por talentos próximos y lejanos, por maestros y amigos. Un intento de pensar el lugar del cine en el aprendizaje, la vocación y la creación.