La crisis económica mundial ha provocado que las previsiones existentes hasta ahora sobre la evolución del turismo sean ya inservibles, siendo necesario tanto comprender adecuadamente el nuevo contexto, como, sobre todo, identificar correctamente las corrientes de cambio. La historia económica muestra que escenarios inciertos como el actual suelen dar lugar a la remoción de las fuentes de ventaja competitiva, provocando que algunos competidores entren en declive, mientras que otros emergen. El estancamiento en la evolución de la demanda ha dejado a la vista, con total crudeza, las debilidades de nuestro sector turístico, de modo que aquellos retos que antes aceptábamos como importantes ahora se han vuelto urgentes e ineludibles. Este libro aborda desde una perspectiva práctica, incluso orientada a la acción, los principales vectores de cambio que ha de encarar la industria turística para ser capaz de mantener su contribución a la economía del país y, más aun, para captar los nuevos segmentos de mercado, aquellos que nos permitirán crecer en el largo plazo. Superar exitosamente esta crisis va a requerir un abordaje quirúrgico, esto es, preciso y completo, e imaginativo. Aspectos como la gestión de la marca territorial, la mejora de la calidad, el esfuerzo innovador, la mejora de la información disponible y, por supuesto, la sostenibilidad, constituyen el núcleo duro de los trabajos que han de desarrollar empresas e instituciones para mantener un lugar de privilegio en el escenario del “nuevo turismo”.