Este libro ofrece una cuidada síntesis de la investigación teológica sobre las relaciones entre Nuevo Testamento y vida consagrada. Se divide en dos grandes partes: la primera aborda los elementos básicos que caracterizan la vida religiosa, como la consagración, la vocación y la vida comunitaria, mientras que la segunda se ocupa de los votos de castidad, pobreza y obediencia, en un intento de entender el modo en que el Nuevo Testamento ilumina los llamados "consejos evangélicos". Finalmente, se analiza la imagen de la fracción del pan, el lugar por excelencia en el que se modela el religioso para vivir a fondo la vocación radical que indican los textos del Nuevo Testamento. Las reflexiones de Giacomo Perego nos ayudan a descubrir que vida cristiana y vida consagrada no están separadas, sino que, por el contrario , ambas tratan de responder, a su manera, al mandato de buscar el reino de Dios.