Gracias a la ciencia y la tecnología vivimos mejor, mucho mejor de cómo vivían nuestros antepasados, y estamos sometidos a menos mitos e ignorancias que ellos. ¿Habremos llegado, sin embargo, a un punto, en nuestros desarrollos científicos y tecnológicos, en el que la luz roja de «Peligro. No atravesar» se ha encendido? Una luz roja que si se transgrede puede poner en riesgo nuestra propia existencia como especie. Esta es la pregunta que se formula y analiza en este libro el eminente astrofísico y cosmólogo británico Martín Rees. La ciencia, señala Rees, está avanzando a un ritmo tan rápido que puede conducir, si no la controlamos, a la desaparición de nuestra especie durante el siglo XXI. Algunos de los elementos que pueden conducir a semejante final ya se encuentran entre nosotros, mientras que otros sólo los podemos imaginar, como nanomáquinas que se reproduzcan catastróficamente u ordenadores superinteligentes. «Hasta ahora», escribe, «han sido la religión, la ideología, la cultura, la economía y la geopolítica las que han moldeado las sociedades. Todos estos elementos, en su inmensa variedad, han constituido el pretexto para disputas internas y para guerras. Sin embargo, un elemento que ha permanecido sin cambiar a lo largo de los siglos ha sido la naturaleza humana. Pero en el siglo XXI medicamentos, modificaciones genéticas y acaso implantes de silicio en el cerebro cambiarán a los propios seres humanos, sus mentes y actitudes, incluso sus físicos». No es este libro una obra alarmista, que busca ?como han hecho otros? predisponer a una parte importante de la sociedad en contra de la ciencia. Todo lo contrario. Su autor es un científico que ama su profesión y que únicamente pretende que la investigación científica no deje de ser lo que hasta el presente mayoritariamente ha sido: un maravilloso bien para nuestra especie.